Proyectos inmobiliarios que se ostentan como los revitalizadores de los mercados corporativos de la Ciudad de México, como la ampliación y modificación de un hotel –ubicado en el número 929 de Insurgentes –en la intersección entre dicha avenida y el Eje 5 Sur– carcomen el espacio público y con el paso de los años le arrebatan la banqueta a los peatones.
Desde hace más de nueve años, los trabajos al interior del predio de la colonia Ciudad de los Deportes comenzaron a ampliarse hacia la banqueta, que pasó de más de cuatro metros a un corto trecho cercano a un metro por el que apenas pueden transitar los peatones del lado del Eje 5 Sur
Por denuncias ciudadanas, Publimetro, acudió al lugar a constatar el corto trecho que los tapiales le dejaron a los peatones para transitar, y los vecinos explicaron que, aunque han presentado quejas ante los gobiernos de la CDMX y de la alcaldía Benito Juárez, las autoridades no dan respuestas.
“No nos han dado solución, ni le han dado a ningún tipo de trámite porque años van, años vienen y esto sigue igual. Yo no sé qué están esperando, ¿a que cambie de autoridades o a que sea más favorable? No sabemos, pero en sí es es una lástima y es un perjuicio para todos los vecinos”
— Comentó a Publimetro un ciudadano afectado por la invasión del espacio público.
Con el apoyo de herramientas tecnológicas, este medio constató cómo los trabajos que se iniciaron en 2014 han ido despojando de la banqueta a los transeúntes.
En 2011, la esquina en la que hoy está el 929 de Insurgentes, que entonces albergaba edificaciones de negocios como el restaurante “Los Guajolotes”, la banqueta superaba los cuatro metros sobre el Eje 5 Sur, incluso se pueden observar jardineras y varios árboles sobre la acera.
No obstante, imágenes del año 2015 muestran como el inicio de las obras un año atrás, propiciaron la tala de los árboles que estaban en la banqueta y, para 2017, la acera ya había sido reducida a un metro por los tapiales de la obra.
Dicha situación prevalece hasta 2023 y, pese a que la construcción enfrentó una clausura por parte de las autoridades locales, actualmente exhibe una lona que informa que el predio está sujeto a una evaluación de impacto urbano por parte de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) de la CDMX.
“Pasar es una calamidad”
Según los criterios para el ordenamiento del espacio público de la CDMX, el ancho mínimo de la franja de circulación peatonal (banqueta) debe ser de 1.20 metros, y en caso de longitudes menores o iguales el mínimo permitido será de 90 centímetros. No obstante, esto no justifica la ampliación de la obra hacia espacios públicos al pasar de los años.
“Pasar es una calamidad porque aquí vienen incluso tráilers y es un peligro para mí, y pues a veces hay gente en silla de ruedas que se tiene que atravesar del otro lado”
— Señaló a Publimetro un habitante de la colonia Ciudad de los Deportes.
El Artículo 20 del Reglamento de Construcciones de la CDMX, señala que “no se permitirá colocar estructuras, postes o instalaciones en banquetas, cuando con ellos se impida la entrada a un inmueble o se obstruya el servicio de una rampa para personas con discapacidad, así como el libre desplazamiento de éstas en las banquetas”.
Mientras que en el numeral III del artículo 194 del Reglamento antes mencionado, señala que en las obras que se ejecuten en un predio a una distancia menor de 10 metros de la vía pública, se permitirá colocar tapiales que podrán abarcar una franja anexa de hasta de 50 centímetros; empero, no se indica nada sobre extenderse varios metros.
Testimonios de trabajadores de la zona refieren que se desconocen las razones del cambio drástico en la longitud de la banqueta; sin embargo, aseguran que quizá es por “motivos de seguridad” por los trabajos que se realizan tras los tapiales. Otros indicaron que a veces prefieren caminar por debajo de la acera por su “estrechez”, a pesar de los riesgos que implica esta acción en una vía primaria.
¿Qué dicen las autoridades?
Publimetro contactó a la Seduvi para constatar que no se estuvieran violando el derechos de los ciudadanos; así como para indagar sobre las razones por las que dicha obra invadió la banqueta.
La dirección de comunicación social de la dependencia capitalina, explicó que está facultada para emitir los Certificados Únicos de Zonificación de Uso del Suelo, en los que se indica lo que legalmente se puede hacer en cada predio (uso, niveles, área libre y metros cuadrados a construir), por lo que se aclaró, que la invasión de la banqueta era competencia de la alcaldía Benito Juárez.
Seduvi detalló que de acuerdo a la Ley Orgánica de las Alcaldías en la CDMX, éstas tienen la facultad de emitir –para todas las construcciones- documentos como el registro de manifestación de construcción (necesario para la colocación de los tapiales); el aviso de terminación de obra; autorización de uso y ocupación, y los acuerdos regulatorios.
Este medio también cuestionó a la dirección de comunicación social de la alcaldía Benito Juárez para saber más detalles sobre la aparente invasión de la obra al espacio público y la reducción de la banqueta en el tramo correspondiente al Eje 5 Sur. Sin embargo, las autoridades de la demarcación no respondieron al cierre de esta publicación.
A considerar
- En la CDMX, las multas por invadir la banqueta van desde las 50 hasta 800 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), es decir pueden alcanzar los 82 mil 992 pesos.
- Alrededor de 189 metros cuadrados de espacio público fueron secuestrados por la obra ubicada en Insurgentes 929.