MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Según el comunicado recogido por la agencia de noticias kurda-iraquí Rudaw, el presunto yihadista tenía la orden de recabar toda la información posible de la situación de las fuerzas de seguridad en la provincia de Nínive, en el norte del país y frontera con Siria, otro territorio en su día dominado por la organización.
El sospechoso fue finalmente detenido tras una emboscada en el hotel de la capital, siguiendo instrucciones del ministro del Interior iraquí, Abdulamir al Shamari. El individuo habría confesado tras su detención que estaba vinculado a Estado Islámico y ahora se encuentra arrestado de conformidad con el artículo 4 de la Ley Nacional Antiterrorista.
A pesar de su derrota territorial en 2017, Estado Islámico sigue muy presente en Irak en forma de células aisladas que se han convertido desde entonces en objetivo de las operaciones de seguridad de las fuerzas iraquíes, como la que por ejemplo desembocó este pasado sábado en la detención de dos miembros de la organización en la provincia de Kirkuk, en el norte del país, según la agencia oficial INA.
