MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El informe, elaborado por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en colaboración con autoridades locales, estima que 4,35 millones de haitianos sufrirán inseguridad alimentaria aguda en el periodo que va hasta febrero de 2024.
Representa una reducción con respecto al anterior tramo, en el que había 4,9 millones de personas en situación crítica, y las agencias lo atribuyen en gran medida a la mayor disponibilidad del combustible, la apertura de rutas alternativas de transporte y un mayor nivel de asistencia.
El representante del PMA en Haití, Jean-Martin Bauer, ha aplaudido este avance, aunque sea "una reducción modesta", pero al mismo tiempo se ha mostrado "extremadamente preocupante" por unos niveles de hambre que siguen siendo "altos" en un contexto en el que los fondos se sitúan "en un nivel críticamente bajo".
"Sin una inyección inmediata de fondos, corremos el riesgo de que un número aún mayor de personas pasen hambre, lo que erosionará los avances logrados con tanto esfuerzo", ha advertido en un comunicado. Haití, de hecho, se mantiene a ojos de la ONU con un país en riesgo de hambruna.
Además, persisten las incursiones de grupos armados en áreas de Puerto Príncipe y se teme una mayor actividad criminal en zonas rurales como el departamento de Artibonite, considerado el granero de Haití, lo que amenaza con provocar problemas en los mercados de alimentos locales.
Un responsable de la FAO, Patrick David, ha llamado a apoyar a los pequeños agricultores locales, ya que este tipo de intervenciones "pueden tener enormes impactos en la disponibilidad y el acceso a los alimentos". Sin embargo, hoy en día, sólo un 12 por ciento de las personas beneficiarias de ayuda disponen de esta "asistencia agrícola de emergencia".