MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El desalojo está siendo efectuado bajo la supervisión de la llamada Fuerza Conjunta Palestina, un grupo armado consensuado en 2014 y desplegado en situaciones de emergencia para proteger a los residentes del campamento, el más grande de Líbano, de las hostilidades que estallan ocasionalmente por la enorme tensión reinante entre las fuerzas del movimiento Al Fatá y grupos islamistas, así como por las pobres condiciones de vida.
Entre cincuenta y sesenta elementos de este grupo, formado por elementos de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Tahalof (una coalición de fuerzas palestinas) y otras facciones islamistas, han participado en las operaciones de desalojo que han comenzado en torno a las 14.00 en las escuelas de la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en barrios como los de Taamir al Tawarek o Baraksat.
Según las fuentes de 'L'Orient le Jour', las milicias ocupaban a día de hoy cinco de las ocho escuelas de la ONU en el campamento. El propio medio libanés ha podido examinar el interior de una de estas escuelas, completamente destruido.
El impacto contra la educación de la población infantil ha sido enorme. Más de 11.000 niños refugiados palestinos no podrán reunirse con sus compañeros al comienzo del año escolar, el 2 de octubre, por estos combates, lamentó la propia agencia de la ONU el pasado jueves.