MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Hasta ahora lo habitual era que Sánchez delegara en sus portavoces parlamentarios las reuniones con las formaciones minoritarias, pero esta vez ha decidido asumirlas en persona, al menos en la primera toma de contacto, para luego dar paso a una comisión negociadora que irá concretando detalles a partir de la próxima semana.
Por eso la última 'foto' de investidura del PSOE con EH Bildu la protagonizó Adriana Lastra, entonces número dos del partido y portavoz socialista, a principios de 2020.
La abstención de Bildu posibilitó que Pedro Sánchez fuera investido presidente del Gobierno en enero de 2020 y en aquella legislatura el Grupo Socialista firmó después algún acuerdo parlamentario con la izquierda abertzale.
Pero ahora se ha dado un paso más y el presidente del Gobierno ha recibido formalmente a una delegación de Bildu en dependencias del Grupo Socialista en el Congreso. A la cita también ha asistido el secretario de organización el PSOE, el navarro Santos Cerdán.
UN PARTIDO CON MIEMBROS DE ETA
EH Bildu es una coalición donde la fuerza mayoritaria es Sortu, el partido que lidera Arnaldo Otegi y que tiene en su dirección al último jefe de ETA, David Pla. En las últimas elecciones municipales incluyó en sus listas a condenados de la banda terrorista, pero ante la presión política optó por rectificar y forzar su renuncia.
También forman parte de la coalición Eusko Alkartasuna (partido creado de una escisión del PNV), Aralar (formado por miembros de la iquierda abertzale que condenaron a ETA, y Alternatiba (escisión de IUEB),
Aunque no hay ningún acuerdo sellado públicamente, el PSOE cuenta con los votos de los seis diputados de la coalición abertzale, ya que desde el principio sus portavoces han dejado claro que harán lo que sea para evitar una repetición electoral que pudiera dar el gobierno al PP y Vox.