Sergio “N”, expolicía de la Ciudad de México, quien fue sentenciado a cinco años, siete meses y 15 días de cárcel por arrojar a un cazo con manteca hirviendo a un “lomito”, el cual murió horas después por las quemaduras que sufrió, fue vinculado a proceso por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa, en agravio de un locatario de una carnicería ubicada en el municipio de Tecámac, por un juez del Poder Judicial mexiquense.
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El impartidor de justicia juez estableció un plazo de un mes para el cierre de la investigación complementaria y ratificó la medida cautelar de prisión preventiva justificada, fijada en audiencia anterior, por lo que deberá permanecer recluido en el penal estatal de Chiconautla.
Los hechos por los cuales es investigado se registraron el 28 de mayo pasado cuando Sergio “N”, ingresó a un local ubicado en el poblado de San Pablo Tecalco en el municipio de Tecámac, donde presuntamente agredió verbalmente a la víctima, después le colocó un arma punzocortante en el estómago y la amenazó con un arma de fuego, para posteriormente salir del inmueble.
Al salir, arrojó al lomito al cazo con aceite hirviendo, lo que causó su fallecimiento.
Esos hechos fueron captados por una videocámara de vigilancia y después fueron difundidos en las redes sociales y en medios de comunicación.
Enfrenta cinco años de libertad condicional
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México inició una indagatoria por los delitos de homicidio en grado de tentativa en agravio del locatario de la carnicería, y de maltrato animal por la agresión al canino, por el cual, el pasado 9 de octubre, el Tribunal de Enjuiciamiento le dictó sentencia de condena de cinco años, siete meses y 15 días de prisión.
Por las acusaciones en su contra por el delito de homicidio, la Fiscalía del Estado de México aportó datos de prueba con los que solicitó a un juez de Control en Línea librar orden de aprehensión en contra de Sergio “N”, mandamiento judicial que fue otorgado y cumplimentado en reclusión el 10 de octubre pasado.
El impartidor de justicia impuso medida cautelar de prisión preventiva justificada, una vez que consideró los argumentos vertidos por el agente del Ministerio Público durante la audiencia inicial, donde señaló que era necesaria, idónea y proporcional, pues el imputado fue sentenciado por el delito de maltrato animal y existe un alto riesgo de que evada la acción de la justicia.
Por el delito de maltrato animal, la jueza que llevó la causa penal decidió que Sergio “N” podrá quedar en libertad condicional y utilizar un brazalete electrónico, pues se trata de un delito no grave.
Ahora, con este nuevo proceso legal que enfrenta ya no podrá salir de la cárcel, hasta que concluya el proceso.
