MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
El empeoramiento del índice PMI compuesto de la zona euro en el mes de octubre refleja una peor evolución del sector servicios, cuyo índice de actividad ha retrocedido a mínimos de 32 meses, con 47,8 puntos desde los 48,7 de septiembre, mientras que el PMI manufacturero cayó a mínimos de 3 meses, con una lectura de 43 puntos, frente a los 43,4 del mes anterior.
De este modo, la aceleración del declive de la actividad económica reflejada en las lecturas preliminares del PMI supone el nivel más bajo desde los primeros meses de la pandemia como consecuencia de la mayor bajada de los nuevos pedidos como consecuencia del empeoramiento del entorno de demanda tanto de productos como de servicios, lo que ha llevado a las empresas a recortar el empleo, "lo que se tradujo en la primera caída de las plantillas desde los confinamientos de principios de 2021".
"En la zona euro, las cosas van de mal en peor", comenta Cyrus de la Rubia, economista jefe de Hamburg Commercial Bank, para quien las lecturas del PMI apuntan a que habrá otro trimestre débil. "No nos sorprendería observar una recesión leve en la zona euro en el segundo semestre de este año", advierte.
Por otro lado, la reducción de la demanda contribuyó a que los plazos de entrega de los proveedores mejoraran por noveno mes consecutivo, aliviando las presiones de los precios en la cadena de suministro, a pesar del incremento de los precios del petróleo.
De tal modo, el coste medio de los precios pagados en el sector industrial cayó intensamente en octubre debido a que la oferta superó la demanda, mientras que el coste de los insumos en el sector servicios aumentó a un ritmo algo más lento en comparación con septiembre.
De su lado, los precios medios cobrados por los productos y servicios aumentaron a un ritmo ligeramente más débil en octubre y la tasa de inflación se redujo hasta su mínima desde febrero de 2021.
Por lo que respecta al futuro, las empresas de la zona euro indicaron una ligera mejora en la confianza con respecto a los niveles de producción y actividad en los próximos doce meses, aunque el nivel general de optimismo se mantuvo entre los más débiles del último año.