MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
Duda inició esta semana la ronda de consultas con los distintos partidos, después de que el actual partido gobernante (PiS) obtuviese una insuficiente victoria en los comicios del 15 de octubre. 'A priori', no alcanza la mayoría ni aliándose con la ultraderechista Derecha Unida, pero en los contactos con el presidente ambas formaciones sí se ven capaces de alcanzar el umbral.
Así lo ha explicado el propio Duda este jueves, en una comparecencia en la que ha confirmado que hay dos bloques políticos que "afirman tener una mayoría parlamentaria", con sus respectivos candidatos a primer ministro. Por parte del PiS aspira a continuar en el cargo Mateus Morawiecki, mientras que en la oposición el aspirante es Donald Tusk, líder de Plataforma Cívica y que ya fue jefe de Gobierno entre 2007 y 2014.
"Tenemos dos candidatos serios para el puesto de primer ministro", ha dicho Duda, que ha advertido de que la alianza tripartita de la oposición no es en sí misma una "coalición formal", lo que por ahora complicaría su margen de actuación, según las declaraciones recogidas por la agencia de noticias PAP.
El presidente ha asegurado que nunca antes se había dado la circunstancia de que tanto el partido vencedor como una alianza alternativa dijesen tener una mayoría, pero ha señalado que "afortunadamente la Constitución da tiempo" antes de tomar una decisión. Sí ha vuelto a deslizar, no obstante, que la "costumbre" siempre ha sido lanzar el encargo al aspirante de la formación más votada, lo que favorecería a Morawiecki.
La convocatoria del primer pleno en el Parlamento abre la puerta ya a un calendario, puesto que el presidente está obligado a dar un nombre en las dos semanas posteriores. Una vez designado un candidato, éste tendrá otros 14 días para lograr la confianza de la Cámara.
Si el candidato propuesto por Duda fracasa, la potestad recaerá en el propio Parlamento, que deberá plantear un candidato alternativo. Con los datos y alianzas que se conocen actualmente, Tusk tendría entonces garantizado convertirse en primer ministro, ya que a su favor tendría a 248 de los 460 diputados que conforman el principal órgano legislativo.