ISLAMABAD (AP) — Casi medio millón de afganos que vivían en Pakistán sin la documentación válida han regresado a su país en apenas dos meses como parte de una política de represión de extranjeros indocumentados, indicó el ministro del Interior en funciones el viernes.
El gobierno en Islamabad inició la represión hace dos meses, y estas expulsiones son el resultado. Pakistán insiste en que la campaña no apunta específicamente a los afganos, aunque son la mayoría de los extranjeros en el país.
Alrededor de 1,7 millones de afganos han vivido en Pakistán, la mayoría de los cuales huyó de su país durante la ocupación soviética de 1979-1989. Además, más de medio millón huyeron de Afganistán cuando el Talibán tomó el poder en agosto de 2021, durante las últimas semanas de la retirada de Estados Unidos y la OTAN.
El ministro del Interior en funciones, Sarfraz Bugti, dijo en conferencia de prensa el viernes que más de 482.000 afganos han regresado a su país durante los últimos dos meses, el 90% de ellos de manera voluntaria. Agregó que Pakistán decidió deportar a 10 afganos que se encontraban en el país legalmente, pero participaban en política.
“Sólo los ciudadanos paquistaníes pueden dedicarse a actividades políticas en el país. Cualquier extranjero al que se encuentre participando en actividad política alguna será deportado inmediatamente”, sostuvo. Bugti no identificó a esos 10 afganos ni explicó cuáles eran sus actividades en la política interna paquistaní.
De acuerdo con Bugti, en la primera etapa en curso sólo se deportará a afganos que no cuenten con la documentación requerida, pero en algún momento todos los refugiados afganos deberán partir porque Pakistán los recibió durante 40 años.
La mayoría de los afganos no gestionó la ciudadanía paquistaní, con la esperanza de no verse obligados a salir del país. El brusco cambio de política ha tensado las relaciones con el gobierno talibán, que quería que Islamabad diera un plazo mayor a los afganos, cosa que el gobierno paquistaní no aceptó.
Es probable que las declaraciones de Bugti provoquen pánico entre los casi 1,4 millones de afganos que, de acuerdo con los registros, viven actualmente en Pakistán.
Estas declaraciones coincidieron con la presencia en Pakistán del representante especial estadounidense para Afganistán, Thomas West, quien se reunió el jueves con el ministro del Exterior interino Jalil Abbas Jillani, según el ministerio.