La economía de México enfrenta un período de marcada debilidad y, con apuros, logró una tasa de crecimiento de 0.2% del Producto Interno Bruto (PIB), durante los tres primeros meses de 2025, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El organismo federal señaló que con tal resultado, el desempeño económico del país apenas alcanzó un repunte anual de 0.6%, contabilizado entre primer trimestre de 2024 e igual periodo de este año, mismo que no alcanza para cumplir con las metas oficiales de desarrollo.
A través de los Pre Criterios de Política Económica para 2026, que fueron entregados al Congreso en abril pasado, la Secretaría de Hacienda fijó un crecimiento anual de 1.5% a 2.3%, rango que dista mucho del 0.6% que alcanzó el PIB al cierre del primer trimestre de 2025.
Y, aun cuando la economía no está en recesión, como lo determinó el Comité de Fechados de Ciclos de la Economía de México (CFCEM) el miércoles de esta semana, el PIB mexicano está más cerca de un crecimiento nulo, definido como una tasa de 0.0%.
Sectores con mejor y peor desempeño
A través de un reporte sobre los resultados preliminares del PIB, al primer trimestre de 2025, el Inegi destacó que el campo fue el sector de la economía con el mejor desempeño, con una tasa trimestral de 7.8% y un avance anual de 6.7%.
Detalló que la industria volvió a destacar como el ‘patito feo’ de la economía nacional, con una baja de –0.1% entre enero y marzo y una caída anual de –1.3%, respecto a los primeros tres meses del año pasado.
Precisó que el sector de los servicios –que incluye el comercio y turismo– arrojó resultados mixtos: en el primer trimestre del año cayó –0.1%, mientras que en su comparación anual logró un avance de 1.1%.
Ramas productivas operan en rojo
Al hacer un análisis por ramas productivos, el Inegi evidenció que ocho subsectores, de 20 que fueron reportados por el PIB, operan con números rojos, con pérdidas de hasta más de –9% durante el periodo de referencia.
Indicó que la minería destacó como la actividad con el retroceso más grave, con un decrecimiento real anual de –9.3%; seguido del comercio al mayoreo, con una baja de –4.6% y “otros servicios excepto actividades gubernamentales”, con una contracción de –2.7%.