Unos 5.300 estudiantes se encontraban haciendo los exámenes finales de bachillerato cuando el colegio sufrió un corte de energía por una falla técnica.República Centroafricana decretó tres días de duelo tras la muerte de al menos 29 estudiantes en una estampida causada tras la explosión de un transformador eléctrico mientras hacían un examen de bachillerato.
En el momento de la explosión, el miércoles hacia las 13.00 (12.00 GMT), algo más de 5.300 estudiantes hacían las pruebas del segundo día de exámenes.
Aunque las autoridades no comunicaron ningún balance oficial el miércoles por la noche, un documento que circulaba en redes sociales y que fue autentificado por el Ministerio de Salud, reportaba que los hospitales de Bangui, la capital, registraron 29 fallecidos.
Unos 260 alumnos resultaron heridos, según el mismo ministerio. "Deseo expresar mi solidaridad y compasión a los padres de los fallecidos, al personal educativo y a los alumnos, y darles mi más sentido y triste pésame", declaró el presidente centroafricano, Faustin Archange Touadéra, en un vídeo grabado desde Bruselas, donde asistía a la cumbre.
Inician investigaciones
El mandatario también anunció una investigación judicial para determinar "las circunstancias de esta tragedia y los posibles responsables".
En cuanto hubo la explosión, supervisores y alumnos, presos de pánico, intentaron huir. Algunos saltaron desde el primer piso de la escuela. Muchos heridos fueron transportados en ambulancia, camionetas o mototaxis, constataron periodistas de AFP.
Michael Jordy Yerima, de 20 años, uno de los estudiantes que sobrevivió a la estampida, declaró a AFP que "tras la explosión que sacudió el edificio, los supervisores, que se suponía nos controlaban, empezaron a huir primero".
"A mi alrededor había otros alumnos heridos, y algunos murieron en el acto", dijo el joven, que saltó por la ventana del primer piso y se rompió un pie.
ct (afp, ap)