El sistema de pensiones de Alemania se tambalea debido al envejecimiento de la población. La nueva ministra de Economía, Katherina Reiche, propone que los alemanes trabajen más tiempo para solucionar el problema.Para la ministra de Economía alemana, Katherina Reiche, existe una manera sencilla de mejorar el sistema de pensiones alemán: "Necesitamos trabajar más y durante más tiempo”, afirmó al periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung a finales de julio.
El envejecimiento de la población de Alemania es, desde hace tiempo, un problema. La edad promedio de la población, de 46,7 años, es la octava más alta del mundo y la tercera entre las principales economías, después de Japón e Italia. Para 2040, se prevé que una cuarta parte de la población tenga 67 años o más.
A principios de la década de 1960 había seis trabajadores asegurados en activo por cada jubilado; ahora la propoción es de 2 por 1. En 2025, dos tercios del presupuesto del Ministerio de Trabajo se destinarán al sistema de pensiones: 121.000 millones de euros.
Disputas por la jubilación
El acuerdo alcanzado por los dos partidos gobernantes alemanes, la Unión Demócrata Cristiana (CDU) y el Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), prometía que no se aumentaría la edad de jubilación actual.
En cambio, el contrato abogaba por medidas más flexibles: "Queremos más flexibilidad en la transición del trabajo a la jubilación”. En la práctica, esto incluiría medidas como la llamada "Aktivrente” (pensión activa), por la que los ingresos por trabajo de hasta 2.000 euros al mes estarían exentos de impuestos para quienes superen la edad legal de jubilación.
Según Jan Scharpenberg, experto en pensiones de la empresa Finanztip, "la duración de la vida laboral es sólo uno de los factores que se pueden ajustar para reformar el sistema de pensiones alemán y afrontar la transformación demográfica”, declaró a DW. "Una reforma del sistema sólo funcionará si se combinan y accionan varias opciones", sugirió.
Cómo funciona el sistema de pensiones alemán
El sistema de jubilación en Alemania es complejo. La edad legal de jubilación es de 65 años, aunque está previsto que aumente a 67 para 2031, pero en función del año de nacimiento y del tiempo de cotización. Sin embargo, las personas con discapacidad o quienes hayan cotizado durante 45 años, podrán jubilarse antes.
La contribución del 18,6 % del salario bruto mensual de un empleado se destina al fondo de pensiones estatal: tanto el empleado como el empleador aportan la mitad cada uno. El Gobierno prevé un aumento del 22,3 % hasta 2035.
Johannes Geyer, investigador de Economía Pública del Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW), advirtió que "hay mucha gente que no se imagina trabajando después de los 67 años". Pero "tal vez aquellos que tienen empleos mejor pagados pueden hacerlo".
Ingresos por pensión versus gastos de pensión
Sin embargo, muchos expertos afirman que centrarse únicamente en la edad de jubilación no es útil. Hay varias opciones para aumentar las cotizaciones al sistema de pensiones: mejores servicios de guardería para que más familias monoparentales puedan trabajar a tiempo completo y pagar cotizaciones más altas. También se podría facilitar y hacer más atractiva lamigración de trabajo a Alemania. Asimismo, hay propuestas para incluir a los autónomos y a los funcionarios públicos en el sistema de cotización público.
Si se tienen en cuenta los gastos, se podrían implementar medidas más drásticas para equilibrar la situación: además de aumentar la edad de jubilación, también se podría extender el "tiempo de espera" (la cantidad de años que se debe pagar al sistema jubilatorio para poder empezar a percibir una jubilación), o reducir la tasa de aumento anual de las pensiones. El aumento de las pensiones se calcula en función de la evolución de los salarios brutos en Alemania y se prevé que sea del 3,74 % para 2025.
Comparación internacional
El sistema de pensiones alemán es muy diferente a la de otros países europeos. En Dinamarca, por ejemplo, la edad de jubilación está vinculada a la expectativa de vida en el país, de modo que aumenta automáticamente a medida que las personas viven más tiempo.
Y en Suecia, las contribuciones individuales se invierten en diversos mercados financieros, y los beneficios se pagan al llegar a la vejez.
"Eso ayuda a diversificar el riesgo", afirmó Geyer. "No dependen tanto del envejecimiento de su propia población". En el sistema alemán, en cambio, las contribuciones de los trabajadores se utilizan para financiar las pensiones actuales.
"Otros países lo han hecho mucho mejor", afirmó Geyer. "Reino Unido, Países Bajos, Dinamarca y Suecia cuentan con sistemas de seguro obligatorio con costos relativamente bajos y buenos beneficios. Eso es lo que falta aquí", concluyó el experto.
(rmr/cp)