La bancada del Partido del Trabajo (PT) en la Cámara de Diputados exigió que la ludopatía sea reconocida y atendida como un problema de salud pública en México, al advertir que se trata de un trastorno adictivo de carácter crónico que está creciendo en el país y cuyas consecuencias afectan no solo a quienes lo padecen, sino también a sus familias y a los sistemas de salud.
La iniciativa, enviada a la Comisión de Salud para su revisión, propone reformar los artículos 3 y 73 de la Ley General de Salud con el fin de obligar al Estado mexicano a implementar acciones de prevención, diagnóstico y tratamiento clínico especializado para personas con juego patológico.

Apostar un problema de salud mental
La diputada Ana Rojo Pimentel explicó que la propuesta busca garantizar acceso a tratamientos integrales y permanentes, así como fortalecer la capacitación del personal médico y psicológico. Además, plantea crear programas de rehabilitación y acompañamiento basados en criterios técnicos avalados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Rojo Pimentel advirtió que la falta de un reconocimiento formal ha generado omisiones que derivan en consecuencias graves para la salud mental, emocional y económica de las personas. “La omisión de su tratamiento oportuno afecta el entorno familiar y social, y genera impactos acumulativos en los sistemas de salud pública y bienestar social”, señaló.

El PT recordó que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) emitió recientemente una alerta sobre los riesgos del juego patológico, mientras que la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) mantiene mecanismos de atención, aunque con un alcance insuficiente para enfrentar la magnitud del problema, que podría intensificarse en los próximos años.

