Algunos empleados de la Secretaría de la Función Pública se dan vida de millonarios con cargo al erario público, según revela un reportaje publicado hoy por la agencia Reuters.
En el texto, firmado por la periodista Elinor Comlay, se evidencia que los funcionarios de la dependencia encabezada por Virgilio Andrade se pagan lujos cuando están viaje, a cargo de los bolsillos de los ciudadanos.
«Una cena de champán, caviar y salmón ahumado en el restaurante de la parte superior de Harrods fue cómo Hilda García, funcionaria en la lucha contra la corrupción mexicana, gastó parte de sus 450 dólares por día de dieta de viaje en Londres, el pasado año», se lee en el reportaje.
«Uno de sus colegas, Jorge Pulido, enviado a Kuala Lumpur para una conferencia, se las arregló para gastar más en los taxis y comidas durante una escala en Frankfurt, que lo que dispuso en sus seis días de estancia en el hotel en Malasia», continúa el texto.
Además narra que Alejandro Bonilla, quien estuvo en Hawai para las negociaciones del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), «disfrutó tanto de los calamares en un hotel en Kona que se comió tres rondas en 24 horas».
Pero en la investigación también aparece la mesura ya que «Jaime Cerdio era más austero. En un viaje a Washington, vivía con sandwiches y refrescos de 10 dólares que compró en el Safeway local, y pagó casi un tercio de su total de dinero asignado para diario, por lo que repuso a las arcas del gobierno más de mil dólares», según Reuters.
Virgilio Andrade fue designado el 3 de febrero de 2015 como secretario de la Función Pública y tuvo como primer tarea investigar a Peña Nieto, a su esposa, Angélica Rivera y al secretario de Hacienda, Luis Videgaray, por haber comprado mansiones al Grupo Higa.
Andrade concluyó con su investigación diciendo que no había ningún conflicto de intereses.
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