Su ausencia y muerte calan como si hubiera sido el día de ayer “está en carne viva”, aseguró Luis Carlos Contreras, padre de María Fernanda Contreras Ruiz, la chica egresada del Tecnológico de Monterrey, quien presuntamente fue privada de la existencia por un excompañero de trabajo, en Apodaca.
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Este domingo, se celebró una vigilia en su honor en el aniversario del tercer mes de su desaparición. El evento se realizó frente al mural que artistas anónimos pintaron en honor de ella y otras desaparecidas como Yolanda Martínez y Debanhi Susana Escobar, en una barda del ayuntamiento de San Nicolás.
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El padre de familia dijo que pese al dolor que llevan tienen que seguir adelante, pero la recuerdan todos los días desde que se despiertan y toman café.
En cuanto a las autoridades que son las encargadas de investigar el caso, advirtió, que no les están pidiendo ningún favor solo que hagan su chamba, su trabajo.
“Porque nosotros ya estamos cansados de lo que vivimos todos los días; siempre las mujeres salen perjudicadas ya sean niñas abusadas o en el plano profesional y laboral también o en el caso de mi hija que era un supuesto compañero, amigo de trabajo”, aseguró.
El 3 de abril, María Fernanda salió de su casa en un fraccionamiento privado del sur de Monterrey y sus familiares ya no supieron nada de ella hasta que fue localizada sin vida tras un cateo a una vivienda de Apodaca.
Su presunto asesino la privó de la vida para no pagarle una deuda y después huyó al municipio de Francisco I Madero, Coahuila en donde fue detenido el 12 de abril.
“Exigimos que las autoridades hagan su trabajo y ahora que se aproxima el mes de octubre que acaba el periodo de recabar pruebas en el caso de MariFer que sean lo suficientemente contundentes para que la persona ahí se quede varias décadas adentro”, dijo Contreras.
Agradeció el apoyo de todos sus seres queridos, así como de toda la gente que aún sin conocerlos le han mostrado su apoyo y dirigido una oración.
“La verdad es que nos ha ayudado a tener paz, relativamente, porque la pérdida de una vida es irreparable”, puntualizó.