Disculpas públicas a los deudos de las 52 personas fallecidas en el ataque al Casino Royale, y a la comunidad en general, es lo que el gobierno ofrecerá el próximo 25 de agosto a las 16:00 horas.
Al cumplirse 11 años del incidente que marcó de forma negativa la historia de Nuevo León la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas organiza la ceremonia en los bajos del Palacio Municipal de Monterrey.
“Esto es muy importante, no sólo para nuestras familias sino para nuestra sociedad”, comentó Samara Pérez Muñiz, vocera de los familiares de los fallecidos.
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Indicó que se espera la presencia del gobernador Samuel García, del alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas y autoridades federales.
El 11 de agosto de 2011 un comando armado penetró en el Casino Royale, ubicado en el área de San Jerónimo.
Los delincuentes rociaron gasolina. La zona de Bingo se incendió y las llamas alcanzaron todas las áreas del lugar.
Un total de 52 personas, dos embarazadas entre ellas, fueron las víctimas mortales.
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El atentado se perpetró, presuntamente, porque el dueño del establecimiento no pagó “cuota” al grupo delictivo, reveló la Procuraduría de Justicia, en ese entonces, encabezada por Adrián de la Garza.
“Se va a reconocer que las autoridades cometieron omisiones”, señaló Pérez Muñiz.
Las disculpas públicas por los hechos ocurridos en el ataque al Casino Royale son parte de la reparación integral del daño, ordenada por la Comisión Nacional de Derechos Humanos en la recomendación 66/2012
Pérez Muñiz aseguró que el evento será un parteaguas en México.
“Además de que mientras tengamos memoria, hechos tan lamentables como este no deben repetirse”, expresó la activista.
Las disculpas de Margarita Arellanes
En 2013, la entonces alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, ofreció una disculpa pública a los deudos después de que en enero de ese año se retiraron cruces, fotografías, veladoras y flores que estaban en la avenida San Jerónimo, como homenaje a las víctimas.
La panista citó a los deudos en el Museo Metropolitano de Monterrey para presentar sus condolencias en cumplimiento de la recomendación emitida por la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
“Es un deber moral de todos los niveles de gobierno reconocer las omisiones que existieron y pudieron haber evitado tan lamentable tragedia. Cada nivel de gobierno, federal, estatal y municipal, habrán de asumir su responsabilidad histórica ante este hecho tan lamentable, por las omisiones que pudieron generar el derecho a la vida, la seguridad y la integridad”, dijo Arellanes en esa oportunidad.
Durante el evento, la alcaldesa leyó los nombres de cada una de las víctimas y expresó que la mejor forma de rendirles un homenaje era hacer que se cumpliera la ley.
