En estas semanas recientes se han presentado una serie de depresiones tropicales en el centro del país, lo que ha generado fuertes problemas de inundaciones en el Valle de México, principalmente en Chalco, donde han resultado afectadas cientos de familias que padecieron las inundaciones de sus viviendas.
Nos hemos preguntado, junto con usted amable lector, porqué tantos problemas, afectaciones e inundaciones en esta zona del centro del país, que año con año padece de manera recurrente esta situación.
Pues bien, los especialistas señalan que no se debe a una sola causa, sino a una suma de factores. El primero de ellos, afirman, es la muy significativa diferencia entre la cantidad de agua que puede conducir un afluente en temporada de estiaje y el agua que conduce ante lluvias normales o extraordinarias.
Añaden quienes conocen de esta materia que estos pequeños afluentes pueden estar secos durante meses y, en otros, conducir mínimas cantidades de agua, que ante ojos inexpertos se ven inofensivos, pero con lluvias excesivas, debido a sus pequeñas dimensiones, fácilmente se desbordan.
Un segundo factor, y tal vez el más importante, es el crecimiento desbordado e irregular de la mancha urbana, que conlleva a la pavimentación extensiva de áreas que antes absorbían agua.
Argumentan los estudiosos que esto aumenta la escorrentía superficial durante las lluvias, llevando rápidamente el agua a las partes bajas donde los drenajes son insuficientes ante la cantidad de agua, causando desbordamientos y, con ellos, inundaciones.
Por su parte, investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indican que estas inundaciones también están relacionadas con el calentamiento global que altera los patrones de lluvia intensificando las precipitaciones, lo que nos lleva a eventos de lluvias más intensas y menos predecibles.
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El problema, añaden los científicos universitarios, se complica aún más si se considera que muchas ciudades tienen sistemas de drenaje diseñados hace décadas para condiciones climáticas menos extremas y para una menor densidad poblacional.
Por nuestro lado, amables lectores, añadimos otro factor causante de las inundaciones y es el que se refiere a la acumulación de toneladas de basura que taponan los drenajes, tal y como se vivió en Chalco, Estado de México.
Y esto sólo tiene que ver con la irresponsabilidad de los habitantes que no son conscientes (hasta que padecen las consecuencias) que tirar desperdicios en donde no deben hacerlo es un acto que se revierte a su propia seguridad.
Como vemos, amables lectores, estas afectaciones e inundaciones que padecemos durante la temporada de lluvias en nuestras ciudades no tienen una solución sencilla, se requerirán cuantiosos recursos económicos, que no existen, así como voluntad de las autoridades, que tampoco se ve, para resolverlas.
Lo único que restaría a los habitantes de las zonas del país recurrentemente afectadas por las excesivas precipitaciones es tomar precauciones, porque las autoridades brillan por su ausencia.
Hasta la próxima.