Abelina López, alcaldesa de Acapulco, ya no se guardó nada y le declaró la guerra a la familia Salgado Pineda. En medio de tensiones políticas, la morenista acusó directamente a Félix Salgado Macedonio de estar detrás de una campaña de difamación en su contra.
La pelea ya no es soterrada: los trancazos van con nombre y apellido. Por lo que pidió la intervención de la Secretaría de Gobernación para impedir ser detenida por los intereses del fuego amigo de quienes mecen la hamaca.
Ronald Johnson, embajador de Estados Unidos en México, se lanzó en redes tras las protestas en Los Ángeles y soltó una frase que sonó a doble filo: “Los manifestantes violentos en LA no representan al pueblo mexicano: digno y trabajador, que conocemos y respetamos”.
El diplomático quiso dejar claro que las acciones del gobierno estadounidense buscan “proteger a todas las comunidades y reforzar el Estado de derecho”. ¿Mensaje amistoso o jalón de orejas con envoltura diplomática? Porque remató con un: “México es nuestro socio y nuestras naciones están profundamente unidas”.
Eduardo Ramírez, gobernador de Chiapas, no se anduvo con rodeos y acusó a las autoridades de seguridad de Guatemala de estar “coludidas” y “al servicio de la delincuencia organizada”. La bomba estalló luego de que presuntos narcos escaparon hacia territorio guatemalteco tras un enfrentamiento con fuerzas mexicanas que dejó cuatro muertos. El gobernador dejó entrever que del otro lado de la frontera no solo los dejaron pasar... ¡los habrían protegido!
Estefanía Veloz, una de las voceras del gobierno en turno, comenzó la colonización de la opinión pública mexicana desde España, becada por Pablo Iglesias, fundador de Podemos, la izquierda radical española, y creador de Canal Red, quien aprovechando sus buenas relaciones con el partido en el poder, Morena, vio la oportunidad de expandir fronteras, y crear una programación especial de Canal Red para Latinoamérica, empezando por México.
Aprovechando que la mayoría de visualizaciones provienen justamente de nuestro país, calificando a Latinoamérica como la reserva ideológica, y de los recursos, de la izquierda en el mundo, dado que sus posibilidades de influir en la Europa de habla hispana son ya muy pocas o nulas. Todo parece que Iglesias y su equipo dijeron la famosa frase: “¡Izar las velas y levar anclas! A colonizar México