De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, el 80% de los mexicanos han tenido algún episodio de mal aliento, un fenómeno más común de lo que se reconoce y que se puede convertir en un obstáculo en nuestra vida cotidiana.
Dicha condición se puede agravar debido a diversos factores, entre los que se encuentran: cepillarse los dientes con poca frecuencia o con una técnica inadecuada, sobre todo en la zona de la lengua -ya que en este lugar es donde permanecen las bacterias-; comer especias, comidas y bebidas con un fuerte aroma y sabor, como el café o ciertos tipos de alcohol; e ingerir alimentos o productos deshidratantes que reducen la producción de saliva.
También es importante recordar que enfermedades como la periodontitis, gingivitis y trastornos en el aparato digestivo son causantes de halitosis, y en dichos casos es mejor acudir con un especialista.
El mal aliento puede ser realmente incómodo, especialmente en situaciones sociales y profesionales, ya que suele dejar una mala impresión en las personas.
Evitar ciertos alimentos puede ser una solución fácil, pero a veces queremos disfrutar de todo lo que nos gusta, por esta razón te compartimos algunos remedios para evitar este problema.
1. Raspador de lengua
La cavidad bucal es una de las zonas con más bacterias en todo el organismo, se estima que hay alrededor de 100 millones de bacterias por cada milímetro de saliva, mismas que por acumulación propician el mal aliento.
Debido a su composición, la lengua termina por ser la parte favorita de los microorganismos para alojarse y reproducirse. Aunado a esto, las personas suelen olvidar incluir esta región de la boca en su técnica de limpieza.
Los limpiadores de lengua suelen ser la opción adecuada para aquellas personas que desean dejar atrás la halitosis, pues su forma y estructura están diseñadas específicamente para higienizar por completo este músculo.
Existen opciones de acero inoxidable, cobre y plástico, escoge la que mejor se adecue a tu presupuesto. Considera que el metal tiene una duración más larga, el cobre cuenta con propiedades antibacterianas y el plástico suele ser más barato.
2. Infusiones
La hidratación es de suma importancia para la eliminación del mal olor de boca, pues de esto depende la cantidad de saliva que se produce en el cuerpo, misma que, en ausencia, afecta a la digestión y promueve la proliferación de bacterias en la boca.
Si bien tomar agua es la solución predilecta para combatir dicha condición, también puedes considerar ingerir infusiones herbales con propiedades antibacterianas y que cuenten con esencias aromáticas agradables, que se transmitirán a tu organismo al momento de ingerirlas.
Puedes consumir algún té que contenga menta, romero, hinojo o anís. Recuerda beberlos con moderación y alternarlos con agua simple.
3. Enjuague
La opción más efectiva, comprobada científicamente, es utilizar enjuague bucal después de tu rutina de cepillado. Este limpiador con base de alcohol, contiene lo necesario para eliminar las bacterias de la lengua, además de dejar una frescura natural debido a sus componentes orgánicos.
Es importante que tomes en cuenta adquirir un enjuague que no contenga químicos dañinos y se adecue a tu pH. Esto es algo que TheraBreath se ha esforzado en ofrecerle a sus clientes con su nuevo enjuague bucal que ofrece una solución completa y avanzada.
Formulado con Clorito de Sodio y xilitol,este producto te ayuda a mantener la boca oxigenada y libre de bacterias, brindándote un aliento fresco y seguro para disfrutar de tus comidas favoritas sin preocupaciones.
Además, con el fin de promover el cuidado de la salud dental, la compañía ha lanzado el reto ¡Échate Otro!, el cual se lleva a cabo en La Buenavida Fonda.
Durante las próximas tres semanas, visita la Refreshment Zone en la calle Mérida número 96 de la colonia Roma Norte.
Allí podrás experimentar directamente el sabor y la promesa de un aliento fresco hasta por 12 horas gracias a su fórmula única. Además, los fines de semana te espera un regalo especial al finalizar tu consumo.
Recuerda que mantener una rutina de cuidado bucal, desde cepillarse los dientes, utilizar irrigadores y enjuagues bucales naturales, así como visitar regularmente al dentista, establece una base sólida para una salud oral óptima.
Estos simples hábitos, junto con la hidratación constante, permiten una experiencia gastronómica sin preocupaciones, donde cada bocado se disfruta con confianza y tranquilidad, sabiendo que la salud bucal está en equilibrio.
