Los kidults —una mezcla de kid (niño) y adult (adulto)— se consolidan como uno de los fenómenos de consumo y cultura pop más fuertes en América Latina. Se trata de adultos de entre 25 y 45 años que mantienen gustos y pasatiempos asociados a la infancia o adolescencia, como juguetes coleccionables, videojuegos retro, cómics, moda urbana y series animadas.
¿Quiénes son los kidults y qué consumen?
Principalmente Millennials y jóvenes de la Generación X, los kidults combinan sus responsabilidades adultas con espacios personales dedicados al entretenimiento nostálgico. Según datos de Statista, este grupo representa el 27% del mercado de juguetes para adultos en América Latina, con una tendencia de crecimiento del 6.8% anual hacia 2027.
El auge de este fenómeno responde a varios factores: la búsqueda de evasión emocional, la conexión con recuerdos de la infancia y la validación social en comunidades online. Según Circana, el 43% de los adultos compró al menos un juguete para sí mismo en el último año, superando en consumo a los niños de 3 a 5 años.
¿Cuánto gastan los kidults en México?
Se estima que un kidult mexicano gasta entre 10 mil y 15 mil pesos al año en productos relacionados con la nostalgia, como videojuegos retro, coleccionables, tenis de edición limitada y merchandising de cultura pop.
Cerca del 45% de estas compras se realizan en línea, a través de tiendas especializadas, marketplaces o reventa en plataformas digitales.
Tiendas como Liverpool, Panam, Miniso, GamePlanet y tiendas de cómics en CDMX y otras ciudades capitales han visto un aumento en la demanda de artículos dirigidos a este grupo.
Además, ferias y eventos como La Mole, el Festival del Juguete, la Comic Con México o convenciones de anime reúnen a miles de consumidores adultos que buscan piezas exclusivas y experiencias inmersivas.
Productos preferidos
- Videojuegos: consolas clásicas como Nintendo 64, PlayStation 1 o Game Boy, junto a títulos actuales como Fortnite o Spider-Man 2
- Moda urbana y zapatillas: ediciones limitadas de marcas como Nike, Adidas o Vans, en colaboración con franquicias como Dragon Ball, The Simpsons o Marvel.
- Cómics, manga y figuras de colección: personajes como Spider-Man, Batman, Naruto, Dragon Ball o Star Wars dominan el mercado.
- Merchandising pop: productos de Disney, Hello Kitty, Barbie, Pokémon y anime, disponibles en tiendas como Miniso, Panam o Liverpool.
¿Cómo interactúan con las marcas?
Los kidults buscan experiencias auténticas, personalizadas y con alto contenido emocional. Prefieren las marcas que apelan a sus recuerdos y que ofrecen colaboraciones creativas o productos de edición limitada.
La comunicación también ha cambiado: según un estudio de Infobip, el 78% de los adultos jóvenes prefiere comunicarse con las marcas a través de WhatsApp, Instagram o Telegram, dejando atrás canales tradicionales como el correo electrónico o las llamadas.
“No quieren mensajes genéricos. Buscan que la marca hable su idioma, en el canal adecuado y en el momento oportuno”, explicó Fabiola Jiménez, Country Manager de Infobip México.
¿Qué impulsa esta tendencia?
La flexibilidad cultural en torno a lo que significa “ser adulto” ha permitido que hobbies antes vistos como infantiles hoy sean parte de la identidad de muchos adultos. Convenciones, comunidades online, e-commerce y plataformas de reventa han fortalecido este mercado.
En México, este fenómeno también tiene su propio vocabulario: expresiones como “modo retro”, “nivel dios”, “epic fail”, “¡Kame Hame Ha!” o “se viene el crossover” inundan redes sociales, comunidades gamer y grupos de coleccionistas.