Por segundo año consecutivo, la Comisión de Derechos Humanos del Estado (CDHE) de Puebla reprobó al penal de San Miguel, pues aún persisten condiciones insalubres, de hacinamiento, déficit de personal médico y de custodios, entre otros.
De acuerdo con el informe “Diagnóstico de Supervisión Penitenciaria”, el Centro de Reinserción Social (Cereso) fue visitado por personal de la CDH durante el mes de julio de 2023, destacando que se obtuvo una participación voluntaria de 694 hombres y 237 mujeres, así como la atención de 74 encuestas de sectores poblacionales específicos; teniendo la participación total de mil cinco personas privadas de su libertad (PPL) encuestadas.
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Al realizar el recorrido por las instalaciones, los visitadores observaron que el área de dormitorios se encontraba excedida en su capacidad; igualmente, los colchones que se encontraban dentro de esta zona estaban sucios y deteriorados. Asimismo, durante el recorrido, personal de esta Comisión advirtió en el área de los sanitarios que se encontraban los inodoros, lavamanos y regaderas con notorio descuido y desperfectos debido a la falta de mantenimiento y el alto número de PPL alojadas en el Cereso visitado.
Al distribuir los alimentos a cada PPL, no se cuenta con un control preciso para racionar equitativamente las porciones alimenticias, ya que se entregan raciones desiguales entre la población penitenciaria.
El organismo estatal destacó la necesidad de contar con personal suficiente para brindar un correcto seguimiento y atención a la población, principalmente del personal médico y medicamentos que puedan cubrir las necesidades de salud de los internos, ya que resulta razonable considerar que ante un alto número de presos, las condiciones de salud y las enfermedades son una constante.
Dentro de los aspectos positivos destaca que se observó a trabajadores, maquinaria e insumos para edificación. A pregunta expresa de los visitadores, personal del Cereso de Puebla señaló que se trata de obras de dignificación de las instalaciones, áreas de trabajo, módulos y comedores.
También comentaron que se realizaron adecuaciones a las bardas perimetrales, sistema de colección y tratamiento de aguas residuales, sistemas de videovigilancia, iluminación, instalación de lavabos y sanitarios antivandálicos, entre otras.
También destacó la construcción de nuevos dormitorios para brindar más y mejores espacios para la estancia de las personas internas.
Los centros penitenciarios peor evaluados fueron el de Tetela de Ocampo, con 5.1; el de Ciudad Serdán y el Centro Penitenciario para Adultos Mayores Privados de la Libertad con Enfermedades Crónico-Degenerativas y con Discapacidad (CEPEAM), con 5.3 de calificación, cada uno; y el de Acatlán de Osorio con 5.5. En total, reprobaron nueve cárceles de 21 evaluadas por el organismo, teniendo un promedio de 6.4 para todo el estado.