El exalcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, dejó sin solventar las observaciones de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) correspondientes a la cuenta pública 2023, por un monto de 200 millones de pesos. Ante ello, la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados revisará el estatus de este expediente.
Así lo informó la diputada federal del Partido del Trabajo (PT), Nora Merino Escamilla, integrante de dicha comisión, quien recordó que el plazo para que Rivera Pérez respondiera a las observaciones ya venció sin que presentara la documentación requerida.
Merino calificó la omisión como un reflejo de descuido administrativo y falta de responsabilidad política, pues aseguró que el exedil tuvo tiempo y recursos para presentar pruebas que justificaran el gasto.
“Es importante saber por qué no se solventó, qué fue lo que se acreditó y qué no. Recordemos que al solventar se puede entregar evidencia de que no hubo desfalco o una justificación técnica de por qué faltaba documentación”, señaló.
La legisladora adelantó que durante septiembre la comisión revisará si existen elementos para descartar un posible desfalco o si en el expediente de la ASF hay documentos faltantes.
Enfatizó que ni Rivera Pérez ni su suplente en el Ayuntamiento, Adán Domínguez Sánchez, podrán evadir su responsabilidad.
“Desde la Comisión de Vigilancia no vamos a permitir que Eduardo Rivera y el suplente que jugó de presidente un rato se vayan sin dar cuentas de dónde quedaron esos 200 millones de pesos”, advirtió.
Merino consideró “preocupante” que una administración que presumía buenas prácticas de transparencia enfrente este tipo de señalamientos.
“Rivera Pérez prefirió el silencio antes que rendir cuentas claras. Eso demuestra que su gestión distó mucho de la honestidad que pregonaba”, apuntó.
Finalmente, la diputada petista sostuvo que esos recursos habrían sido utilizados presuntamente para la promoción política de Rivera Pérez durante sus aspiraciones a la gubernatura de Puebla, cargo que no logró en las elecciones de 2024.