La detención de la activista Estela Hernández, ocurrida en Santiago Mexquititlán por elementos de la Policía Estatal, se debió a reportes ciudadanos sobre alteración de orden público, informó el secretario de Gobierno, Carlos Alcaraz.
De acuerdo con el funcionario, la detención de Hernández Jiménez durante la noche del miércoles, junto con otras seis personas, sucedió luego de que generaran una serie de daños a las instalaciones del DIF Municipal de Amealco, aparentemente durante una protesta por la detención inicial de cuatro personas.
Pese a haber sido liberada horas más tarde, la defensora de derechos humanos señaló haber sido víctima de agresiones físicas y sexuales. Sin embargo, el secretario sostuvo que, por ahora, no existen denuncias formales contra los elementos involucrados en el operativo.
“El reporte que tengo es de alteración del orden púbico, de forma determinada lo podrá tener el juez cívico de Amealco, que es quien conoció de cerca el asunto. Yo lo que quisiera nuevamente es llamar al diálogo siempre, a que tengamos serenidad ante este tipo de temas. Los temas que tienen que ver con los pueblos originarios siempre serán muy sensibles pero también son una gran prioridad para nosotros en cuanto a la promoción en la defensa de los derechos humanos”, dijo.
Alcaraz Gutiérrez ofreció sostener una mesa de diálogo con los detenidos, para dar seguimiento a las quejas en caso de ser presentadas. De detectarse acciones indebidas por parte de los elementos, precisó que serían sujetos a un procedimiento interno por parte de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Por su parte, la Defensoría de Derechos Humanos de Querétaro anunció el inicio de una queja de oficio por presuntas detenciones arbitrarias y uso desmedido de la fuerza pública.
Diversas organizaciones civiles, como el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez o el Nodo de Derechos Humanos condenaron la detención de Estela Hernández, representante del Concejo Indígena de Gobierno de Santiago Mexquititlán, dedicada a la protección de derechos humanos de las comunidades y pueblos originarios de Querétaro.
Hasta el momento, ni la Policía Estatal ni el gobierno municipal de Amealco han dado un posicionamiento oficial sobre los acontecimientos.