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FOTOS: Héroes mexicanos de "carne y hueso"

Aunque nuestro país está aquejado por males en todos los rubros, hay casos como el de Jonathan Tobón , el “niño topo” de Cuajimalpa , que le ponen una cara amable a las noticias diarias.

El menor ayudó a rescatar a un bebé durante la tragedia del pasado 29 de enero en el Hospital Materno Infantil, luego de que una pipa explotara y dejara un saldo de cinco muertos.

También se reconoció la labor de las enfermeras Ana Lilia Ledesma y Mónica Orta Ramírez, así como el camillero Jorge Luis Tinoco, quienes perdieron la vida, así como los equipos de emergencias y rescate que laboraron ese día, en especial del policía Mauro Enrique Vera Suárez.

Pero no ha sido el único caso en el que ciudadanos ayudaron a quienes estuvieron en medio de un siniestro o un evento de la magnitud del Holocausto.

Aquí, casos de héroes mexicanos de carne y hueso:

Sismo de 1985: el 19 de septiembre de 1985, decenas de voluntarios salieron a las calles para rescatar a personas que habían quedado atrapadas tras el derrumbe de edificios en la Ciudad de México, por un sismo de 8.1 grados en la escala de Richter. De ahí surgió un grupo que fue llamado por la prensa de esa época como los “topos”, que un año después del terremoto se constituyeron como una asociación de rescate. Se estima que 10 mil personas murieron. 

Guardería ABC: el 5 de junio de 2009, Juan López Trujillo, “Cayetano”, un desempleado de Sonora, dejó las “caguamas y la mota”, publicó Vice, para meterse a la Guardería ABC a rescatar a menores. “Haz de cuenta que vi el infierno”, comentó uno de los héroes olvidados de esa tragedia. Entró dos veces y rescató a tres niños.

Guardería ABC: Francisco López Villaescusa llegó hasta el inmueble en llamas y decidió con su camioneta golpear uno de los muros del inmueble, pues quienes habían tratado de romper la pared con un pico simplemente no podían. Hizo tres boquetes que permitieron el rescate de decenas de niños que se encontraban en el interior. Recibió una camioneta último modelo y hasta un corrido le compusieron a “ángel”, como le decían de cariño los habitantes de su colonia. 

Holocausto: conocido como el “Schindler mexicano”, Gilberto Bosques, un diplomático que salvó a miles de españoles, que huían de Francisco Franco, de franceses, durante la ocupación alemana, y judíos durante la Segunda Guerra Mundial. Entregó visas a quienes estaban en peligro de muertoe por el gobierno de Adolfo Hitler y los enviaba a México mientras él seguía su labor en Europa. En Francia rentó dos castillos para dar asilo a víctimas de la guerra, pero fue entregado a la Gestapo y recluido junto con su familia en Alemania. El entonces presidente Manuel Ávila Camacho negoció la liberación de presos con el gobierno alemán.

Titanic: Manuel Uruchurtu fue el único mexicano que viajó en el Titanic y murió tras el choque con un iceberg el 14 de abril de 1912. Como político, estaba en primera clase y le ofrecieron subir a un bote. Cuando estaba a punto de bajar, una mujer de la segunda clase con bebé en brazos pidió la dejaran subir, pero los oficiales se negaron. Ante la escena, Uruchurtu cedió su lugar a la inglesa Elizabeth Ramell. Sólo una petición le hizo el mexicano a la mujer: que buscara a su familia y contara cómo había muerto.

Metro Balderas: Esteban Cervantes Barrera vio cómo Luis Felipe Fernández Castillo mataba a sangre fría al policía Víctor Manuel Miranda que intentó desarmarlo dentro de la estación Balderas, en el Metro de la Ciudad de México. Salió del vagón para evitar que siguiera disparando e hizo frente al sujeto, quien después de forcejear lo asesinó frente a usuarios que ese día 18 de septiembre de 2009 atestaban los trenes. Además de las víctimas mortales, ocho personas fueron heridas. En 2010, la ALDF le entregó una medalla póstuma al mérito ciudadano.

​​Explosión en Pemex: en enero de 2013, una explosión sacudió la Torre administrativa de Pemex en la Ciudad de México. De acuerdo con los peritajes hechos por la PGR, el siniestro ocurrió por acumulación de gas en los sótanos del edificio B-2. Fueron 37 los muertos y más de 100 heridos. Fue en medio de esta tragedia que apareció Ricardo Fuentes, conocido como el Wolverine de Pemex, quien ayudó a rescatar a sus compañeros. 

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