El pasado primero de diciembre el pugilismo mexicano se vistió de luto, tras el fallecimiento de José Fernando, hijo del ex boxeador azteca Erik Terrible Morales, quien una semana después narró cómo se dio el fallecimiento del joven que apenas tenía 23 años de edad.
Durante el programa Un Round Más, el Terrible Morales contó que su hijo se encontraba en su casa junto a su mamá; entre 3 o 4 de la tarde fue al Oxxo por un café y un papel higiénico que su madre le encargó, el cual se le olvidó y tuvo que regresar por él. Al volver a casa, se subió a su habitación, y fue hasta las 8 0 9 de la noche que su hermano lo fue a buscar para que bajara a cenar, al momento de entrar a la habitación, José Fernando ya había perdido la vida.
“Cuando su hermano lo vio en el cuarto estaba en un estado durito, rígido. Esto quiere decir que ya tenía rato que le había sucedido un problema. El hecho fue muy simple, estaba en su cama, en su casa en la posición como quedó, boca abajo, se apretó y seguramente tuvo un infarto fulminante, que no le pasó nada y se quedó tieso”, contó el Terrible Morales.
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“Afortunadamente fue en su casa, en su cama, fue algo muy rápido, tenemos la tranquilidad y paciencia que era algo que nadie pudo hacer nada y desafortunadamente así pasó, les agradezco a todos su entendimiento”, añadió.
Finalmente, el Terrible Morales dijo que “la vida debe continuar” y que se quedará con a satisfacción de que su hijo “fue un buen chamaco”.
