La popularidad del Fofo Márquez, hijo de un empresario petrolero, ha estado dada por su dinero, nada más. El adinerado tiktoker ni siquiera tiene buena dicción y su muletilla favorita es “wey”, repitiéndola sin parar en sus conversaciones o declaraciones a la prensa.
Puede resultar grosera la forma en la que Fofo Márquez habla de su vida de lujos, incluso a veces su tono es de burla hacia el resto de los mortales que no se bañan con agua embotellada como él ni se gastan miles de pesos cada semana en botellas de champaña, ha sido que si acaso el influencer Luisito Comunica podría tener la vida que él se da.
“Yo tengo una extensión de la tarjeta de mi papá, wey, yo soy inteligente wey, gasto, wey, con la tarjeta de mi papá wey, y ahorro wey lo que voy ganando de redes,wey, pero es muy poquito, no sale para mi vida, a todo eso se le llama ser emprendedor, jajajajaja”, dijo entre risas en una conversación con el youtuberGusgri
La tarjeta de su papá es una de las más exclusivas y en México apenas unos pocos la tienen.
Las palabras de Fofo Márquez, cuyo contenido en redes se limita a presumir cuán rico es, han desatado comentarios, algunos celebrando su risa, otros, por el contrario, cuestionan el mensaje tan vacío que transmite.
“Chistes de ricos”, “Broma millonaria”, “Me sorprende cuántas veces dijo wey en menos de un minuto”, “El humor de ricos es muy raro”, “Cosas que los humanos no debieron escuchar”, “Esto debe ser solo un personaje, me es difícil creer que realmente alguien sea así”, “Se llama ser mantenido”.
Aunque la familia de Fofo Márquez le ha prohibido revelar sus identidades, él con sus opulencias los ha puesto en descubierto, y fue precisamente al mostrar su exclusiva tarjeta de crédito cuando la prensa pudo dar con el nombre del empresario Rodolfo Márquez, accionista de la cadena de gasolineras Total. El parecido del empresario con su hijo es enorme.
Los ancestros pobres del Fofo Márquez
Se autodenomina con un ‘influencer’. Su verdadero nombre es Rodolfo Márquez y nació el 15 de julio de 1997 en Ciudad de México.
No siempre fueron una familia rica, el abuelo de Fofo Márquez, don Everardo Márquez, fue el primero en dar los pasos para dejar atrás la pobreza. Era zapatero y tomó la decisión de crear una modesta fábrica de calzados cuyo éxito fue tan grande que comenzó todo un emporio industrial.
Pero Fofo Márquez, que no ha trabajado en toda su vida, despilfarra el dinero que comenzó con el esfuerzo de sus ancestros.