Luego de que el Congreso del Estado pidiera la revisión de los documentos que permitieron la construcción del fraccionamiento Cucursola en la Sierra de Santa Rosa, el diputado Ernesto Millán señaló que las autoridades municipales fueron al menos “complacientes” en permitir su construcción sin contar con estudios de impacto ambiental ni todos los permisos estatales.
El diputado agregó que se ha pervertido la aplicación de ley para ayudarle al propietario y a su empresa a imponerse por sobre el interés general de la sociedad y su derecho humano al medio ambiente sano. El propietario de este fraccionamiento es el exdiputado panista, Sergio Ascencio, lo que ha dado lugar a acusaciones de contubernio a pesar del daño ambiental.
“Estamos a casi un año de que la autoridad ambiental logró reunir los elementos jurídicos suficientes para dictar una resolución sancionadora ordenando la restauración del ecosistema afectado al punto anterior a su intervención y, sin embargo, parece haber instrucciones superiores que dificultan el acceso a la Justicia Ambiental de la sociedad guanajuatense”
— Ernesto Millán Soberanes, diputado local
El Congreso del Estado solicitará su clausura y además la reparación del daño ambiental que este ha generado en la Sierra, siendo que la obra tampoco cuenta con la autorización de la Secretaría de Medio Ambiente.
De igual manera, el congreso lanzó un exhorto para que la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de la Fiscalía General Estatal para que finalice la investigación y, en su caso, lleve a cabo las acciones de responsabilidad penal correspondientes a la carpeta de investigación.