Durante la movilización nacional en Ciudad de México para impulsar la controversial reforma al Instituto Nacional Electoral (INE), funcionarios de Jalisco hicieron el viaje para sumarse a la protesta. Igual a como sucedió en otras partes del país, también hubo denuncias de acarreo para llevar a personas ajenas al partido Morena a la capital.
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Desde la semana pasada comenzaron los reportes y denuncias que empleados del gobierno federal en las delegaciones de Jalisco estaban siendo obligados a viajar a la Ciudad de México e incluso que se solicitaba organizar traslados de beneficiarios de programas sociales.
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Los autobuses partieron de diferentes zonas de la ciudad, situación que se replicó en varios municipios del interior del estado. Algunas de los contingentes partieron de Ocotlán, Guadalajara, Zapopan, Tonalá, Tequila, Lagos de Moreno, Puerto Vallarta, Tlajomulco, Tepatitlán, La Barca, Jocotepec, Autlán de Navarro y Zapotlán El Grande.
Entre los personajes políticos que acudieron a la movilización en ciudad de México se encontraba el coordinador de la bancada de Morena en el Congreso del Estado, José María Martínez, la diputada Yussara Canales, la legisladora María Padilla romo, la presidenta estatal de Morena, Katia Castillo o el regidor en el ayuntamiento de Guadalajara, Carlos Lomelí Bolaños. Ellos aseguraron haber costeado su propio viaje.
Según estimaciones, tan sólo la delegación de Jalisco trasladó cerca de cuatro mil personas, dentro de este grupo de voluntarios y también quienes acudieron de manera obligada a participar en la marcha. Los morenistas presentaron cifras mucho más optimistas al señalar que trasladaron a 50 mil personas.
Funcionarios de Morena en Jalisco afirmaron que los mismos militantes de Morena fueron quienes pagaron sus pasajes a la Ciudad de México
