Un sismo, seísmo, terremoto o temblor, es un movimiento brusco de la tierra provocado por disturbios tectónicos o volcánicos.
La gran mayoría de los sismos con magnitud superior a 6 en nuestro país, han ocurrido en las regiones noroeste, occidente y suroeste. Esto se debe a que México se encuentra en una zona denominada cinturón de fuego, situada en las costas del Pacífico y caracterizada por actividad sísmica y volcánica intensa. De hecho, por su ubicación entre 5 placas tectónicas, México está considerado como uno de los países más expuestos a la actividad sísmica a nivel mundial.
Si eres mexicano, es muy probable que a lo largo de tu vida hayas escuchado al menos una vez qué hacer en caso de sismo. La recomendación que la mayoría conocemos es un protocolo para desalojar inmuebles y ponernos a salvo en zonas de seguridad. Pero, ¿qué tengo que hacer si estoy manejando?
Sismo tras el volante
1.- Presta atención a las señales.

Percibir el movimiento, escuchar alarmas, ver a la gente salir de casas y edificios, son claras señales de que algo ocurre.
Enciende las intermitentes, disminuye la velocidad, baja el volumen de la radio, baja tu ventanilla para escuchar mejor. ¿Sabes qué ocurre?
2.- Reacciona.
Si ya identificaste la situación y se trata de un temblor, detén tu marcha con seguridad. Busca un lugar para orillarte, lejos de postes, árboles, bardas, cables, puentes, edificios o cualquier otra cosa o estructura que pudera caerte encima.
Si no puedes detener tu marcha por las condiciones de la vía, conduce hacia calles secundarias extremando precauciones: recuerda que los automovilistas y peatones pueden estar mucho menos alertas y precavidos, y que la gente puede estar siendo evacuada hacia el arrollo vehicular.

3.- Espera a que pase.
Una vez que hayas logrado estacionarte, apaga la marcha y las intermitentes, y pon el freno de mano.
Abandona tu auto sólo si es seguro acercarte a algún punto de seguridad. Si no es posible, no salgas de tu auto y enciende la radio para mantenerte informado.
Utiliza el celular sólo en caso de emergencia.
Espera a que el sismo termine.
Si durante el temblor percibiste que le cayeron cables o postes de luz, no te bajes: el vehículo podría estar electrificado. Solicita ayuda de los servicios especializados o de emergencia.
4.- Precaución.
Conduce con prudencia: peatones, ciclistas, automovilistas y transportistas pueden estar igual o más nerviosos que tú.
Toma en cuenta también que pueden existir daños estructurales en la vía o mobiliario urbano, vías bloqueadas y semáforos descompuestos.
Mantente alerta e informado. En muchas ocasiones ocurren réplicas tras un sismo.