La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, pidió a los diputados locales realizar un periodo extraordinario de sesiones de manera presencial para discutir y aprobar las modificaciones a la Ley de Austeridad que le darían casi por competo el control del presupuesto de la CDMX.
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Estas modificaciones fueron aprobadas en comisión este martes y se planeaba realizar un periodo extraordinario de sesiones de manera virtual para aprobarlas, sin embargo, por falta de acuerdos entre las diferentes bancadas esta sesión se canceló.
Ante esto, Claudia Sheinbaum puso orden y en conferencia de prensa por la mañana adelantó que los legisladores sesionarían de manera presencial el próximo viernes para aprobar los cambios a la Ley de Austeridad.
“Para poder desarrollar la sesión ellos están pensando hacerla de manera presencial, tuvieron ahí algunos problemas para poderlo hacer de manera virtual y si lo hacen de manera presencial, van a hacer todos los esquemas de sana distancia, de tal manera que puedan entrar por partes y algunos esquemas que ya los propios coordinadores parlamentarios de los distintos y la propia Jucopo pueda informarles”, comentó.
Más tarde, tras recibir esta indicación, la presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de la CDMX, Isabela Rosales, convocó para este jueves a la Comisión Permanente para votar la realización de un periodo extraordinario de sesiones de manera presencial el viernes 19, tal y como les sugirió la jefa de gobierno.
Desacuerdo
Un grupo de 22 legisladores del PAN, PRI, PRD e incluso uno de Morena, suscribieron un documento para mostrar su inconformidad con las modificaciones a la Ley de Austeridad al asegurar que esto le quita al Poder Legislativo sus facultades de observación al presupuesto de la ciudad.
Precisaron que esto implica un grave debilitamiento de uno de los principios democráticos fundamentales: la división de poderes. Y es que, estas modificaciones al artículo 22 Bis de citada ley, le dan facultades a la jefa de gobierno, a través de la Secretaría de Finanzas, para modificar el presupuesto de las distintas dependencias de gobierno, excepto órganos autónomos, en caso de una emergencia sanitaria.
“Entendemos que la ciudad atraviesa por una crisis extraordinaria y que el Poder Ejecutivo necesita actuar con diligencia para re dirigir el gasto a lo más urgente, que es el bienestar y la salud de los habitantes de la Ciudad de México. Sin embargo, ese no puede ser pretexto para despojar de sus atribuciones constitucionales al órgano que sirve como representante directo de la ciudadanía. Nosotros siempre hemos estado dispuestos a cumplir con nuestra obligación de trabajar por el bien de la ciudad”, señala el documento.
