Estos días son días de guardar, reflexionar, compartir con nuestros seres queridos y de hacer propósitos, y por qué no, en el caso de quienes nos dedicamos a la política, incluso replantear el cómo llevaremos a cabo lo que fue prometido durante el periodo de campañas.
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Como ciudadanas y ciudadanos, es momento de exigir al gobierno que está iniciando su periodo, que cumpla cada promesa efectuada en mítines, recorridos y por supuesto, en los más de 12 años de campaña, que es necesario decir, no cambiaron tanto.
Estamos obligados a recordar que votaron por Morena y el presidente, más de treinta millones de mexicanas y mexicanos, justo como cada vez que alguno o algunos de los integrantes de sus bancadas en el Congreso lo hacen al tratar de legitimar sus decisiones o para justificar las votaciones aplastantes tanto en la Cámara de Diputados, como en la de Senadores, en temas por demás importantes y que por supuesto, fueron abordados en las campañas de todos los que se postularon para ocupar un lugar en el gobierno federal, así como en los gobiernos y congresos locales, y en los espacios del Congreso de la Unión.
A unos días de que el 2018 concluya, estamos obligados a recordar las promesas del ahora presidente de México, como la de bajar el precio de la gasolina a partir del pasado primero de diciembre, promesa que ha quedado anulada y una de las más emblemáticas y repetidas durante sus campañas, y digo que quedó anulada pues la mayoría aplastante de Morena en la Cámara de Diputada, rechazó la reducción de los impuestos que repercutirían directamente en la baja del precio del combustible, lo que significa que no se podrá concluir tal promesa, al menos no en este periodo.
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El por demás lamentable suceso del día de ayer, en plena víspera de Navidad, nos obliga a la oposición a ser más estrictos con quienes hoy son gobierno y mayoría en el Congreso y recordar las palabras del presidente Obrador “sea quien sea, si es corrupto será castigado” y su promesa de desterrar la corrupción para que situaciones como las famosas “ligas de Bejarano” no vuelvan a suceder. Por quiénes nos acaban de dejar, en Acción Nacional continuaremos con el trabajo que la gobernadora de Puebla, Martha Érika Alonso y mi compañero y coordinador, el Senador Rafael Moreno Valle, QEPD, asumieron en su estado y el país, respectivamente, con el mismo compromiso y amor por México.