MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
El ministro de Exteriores de Líbano, Abdalá Bou Habib, ha pedido a los países del Golfo que el desarme forzado que exigen del partido milicia chií Hezbolá desembocaría automáticamente en el comienzo de una guerra civil en el país, mientras todavía colea la crisis diplomática abierta entre Beirut y el colectivo regional de países que lidera Arabia Saudí.
«Se nos está pidiendo que hagamos algo que está fuera de nuestra alcance y que constituye un llamamiento a una guerra civil», ha declarado el ministro en una entrevista a Al Jumhuria.
Líbano lleva meses intentando restablecer sus vínculos con las monarquías del Golfo, tras la crisis diplomática desatada el pasado mes de octubre a raíz de unas declaraciones del ya exministro de Información Georges Kordahi sobre la violencia desatada por Arabia Saudí en la guerra de Yemen.
La dimisión de Kordahi no ha contribuido a solucionar la crisis: los países del Golfo han aprovechado para presionar a Beirut hacia un desarme de Hezbolá, una de las principales fuerzas del país, aliada de Irán y némesis de los saudíes, amparado en la resolución 1559 de la ONU, adoptada en 2004.
El ministro de Exteriores libanés ha preferido dejar correr el tiempo con vistas a la próxima reunión del Consejo de Cooperación del Golfo para finales de este mes, «donde debería discutirse la cuestión libanesa» con ayuda de la mediación kuwaití, encargada de presentar las propuestas del Consejo al Gobierno libanés para facilitar el deshielo diplomático.
Los responsables kuwaitíes están, a juicio del ministro, «muy tranquilizados por la respuesta libanesa» a estas peticiones y «los responsables de la diplomacia de Kuwait son gente muy comprensiva y colaboradora».