El colectivo feminista Red Mariposas de Mujeres Mixes, pidió al gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, la destitución del recién nombrado coordinador General de Atención Regional de la Secretaría General de Gobierno de la entidad, Donato Vargas Jiménez, pues lo responsabilizan de la creación de un chat para la difusión de fotografías y videos privados de mujeres oaxaqueñas, en clara violación a la intimidad sexual como se estipula en la Ley Olimpia.
Donato Vargas Jiménez fue designado el 5 de diciembre, lo que causó la molestia del colectivo quienes condenaron “los pactos patriarcales en el actual gobierno del estado”.
El pasado 8 de diciembre, en el marco de la primera emisión del llamado “Jueves de Gozona”, Jara Cruz fue cuestionado por la periodista Paulina Ríos sobre el nombramiento de Vargas Jiménez y sus acusaciones, a lo que el mandatario confirmó el nombramiento, y aseguró que si éste tiene cuentas pendientes con la justicia, pagará, pero de lo contrario, seguirá gozando de sus derechos políticos.
Te puede interesar: “El primero que hace grilla se va”, amaga asesor argentino de Salomón Jara a secretarios
¡Ya inició el primer programa de #JuevesDeGozona! Nuestro gobierno es popular e intercultural y por ello, realizamos acciones para generar el diálogo y la conciliación.
— Salomón Jara Cruz (@salomonj) December 9, 2022
Somos #UnPuebloTransformandoSuHistoria https://t.co/NlPeWumo6M
Por su parte, la Red Mariposas de Mujeres Mixes denunció en su perfil de Facebook que Vargas Jiménez es el creador del chat “SIERRA XXX”, del cual, afirmaron, existen varias evidencias, por lo que reafirmaron que el mandatario estatal cumpla su palabra y se investigue al funcionario.
No te pierdas: “Se acabó el saqueo”, afirma Salomón Jara en toma de protesta como gobernador de Oaxaca
Cabe señalar que la Ley Olimpia – en el Artículo 249 del Código Penal de Oaxaca– considera como “violencia digital” a las acciones que se expongan, difundan o reproduzcan imágenes, audios o videos de contenido sexual íntimo de una persona sin su consentimiento, a través de medios tecnológicos y que por su naturaleza atentan contra la integridad, la dignidad y la vida privada de las mujeres.
Las sanciones por infringir dicha ley pueden ir desde cuatro a ocho años de prisión, y multas de mil a dos mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente.
