La desaparición de la joven Diana Peña Calvillo conmocionó a los mexicanos, durante una semana no se supo nada de ella y cuando fue localizada estaba desorientada y deshidratada a unos 65/70 kilómetros de donde se le vio por última vez; ahora se sabe que se bajó de su auto porque le avisaron que tenía una ‘llanta ponchada’.
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Lo último que se supo de ella fue que salió de Coacalco, en el Estado de México, muy al norte de la CDMX, y fue localizada en la carretera libre a Cuernavaca, en el extremo sur de la capital del país.
Tras la localización con vida de Diana Peña Calvillo recibió atención médica y cuando se puso en contacto con sus familiares les informó que conducía su auto por una autopista de cuota del Estado de México, pero otra persona la indicó que traía una llanta ponchada, lo que hizo que se distrajera y luego de eso no se supo nada de ella.
Ahora que se conoce un poco más sobre el caso, cabe mencionar los modus operandi que usan los delincuentes para asaltar o incluso secuestrar a sus víctimas.
Formas que usan los ladrones para asaltar o secuestrar
Llanta ponchada
Este se ha convertido en uno de los métodos más frecuentes, y al parecer es el que usaron con Diana Peña Calvillo previo a su desaparición.
Aquí participan varias personas de manera coordinada, entre tres y cinco delincuentes que engañan y distraen a la víctima.
Estas personas identifican la ruta y buscan a las personas que parecen más vulnerables. Primero alguien avisa que la llanta va baja, después de unos minutos se acerca otra persona y también comenta sobre el mal estado del neumático.
Por último, una tercera persona realiza una advertencia grave para que su víctima se orille en alguna calle. En ese momento llegan y le asaltan.
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Camuflan los autos
Según reportes policíacos y de denuncias ciudadanas, uno de los métodos es el robo por “camuflaje”. En este caso los delincuentes cambian su auto por el de las víctimas.
Aquí los ladrones están al pendiente de las personas que traen el mismo modelo y color de coche para después asaltarlo e intercambiar las placas.
Después dejan su coche para que cuando se haga la denuncia, se encuentre otro auto que no era. Esto puede suceder durante un trayecto o mientras dejamos nuestro vehículo en lugares poco visibles.
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Amarran ropa en los limpiadores
Los ladrones colocan ropa o algún objeto extraño en el parabrisas para hacer que el conductor pierda tiempo mientras quita el objeto y en esa oportunidad lo asaltan.
En este caso la recomendación es no acercarse y llamar a la policía o bien, subir al auto y arrancar lo más pronto posible sin para por ningún motivo.
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Embarrar huevo o grasa en el parabrisas
Tanto el huevo como la grasa obstaculizan la visibilidad, pero hay quienes intentan echar líquido limpiaparabrisas o agua de los inyectores, lo que hará que se ensucie más y se tape por completo el panorama, por lo que es mejor dejar así lo que esté embarrado en el parabrisas y salir directo hacia un sitio concurrido como una gasolinera, por ejemplo.
