La diputada local del PRI, Alhinna Vargas presentó una iniciativa de reforma para incorporar al Código Penal de Nuevo León un capítulo denominado “Delitos contra la Libertad Reproductiva” con el objeto de evitar que las mujeres sin su consentimiento sean sometidas a procedimientos de reproducción asistida.
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Entre estos procedimientos se encuentran la fertilización in vitro, así como la inseminación artificial.
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Explicó que si bien es cierto que estas técnicas de reproducción humana han permitido ayudar a miles de familias a tener hijos para aplicar cualquiera de estas técnicas se tiene que contar con la voluntad de la esposa o la mujer que será sometida al procedimiento.
“Porque la voluntad pro creacional es indispensable y esta solo la adquiere la mujer, quien es la única persona que puede gestar un nuevo ser”, comentó.
Añadió que la iniciativa que propone es concreta porque establece que en los casos de reproducción asistida primero se tome en consideración la voluntad de la mujer.
“Por lo tanto quienes realicen, induzca, inciten bajo engaños o bajo cualquier otro tipo de presión, a someterse a un proceso de reproducción humana asistida a mujeres mayores de 18 años que no haya dado su consentimiento de manera expresa, se les castigará con una pena de 4 a 7 años de prisión”, estableció.
Sin embargo, la pena se duplicaría en el caso de que la mujer sea menor de edad o sea incapaz de conocer las consecuencias de someterse, a ese procedimiento.
“Además, si se lleva a cabo con violencia, la pena podría ser entre 10 y 15 años de prisión”, expuso.
La legisladora comentó que de aprobarse este nuevo tipo penal, se estará garantizando la libertad reproductiva de las mujeres de Nuevo León.
