Cuando Mario Escobar y Dolores Bazaldúa se fueron a la cama el 8 de abril de 2022 nunca pensaron que sus sueños de tener una hija exitosa, realizada como mujer y profesionista se tornaría en una pesadilla macabra de la cual aún no pueden despertar. A partir de esa fecha, la vida del matrimonio quedaría marcada por una angustia de no saber dónde estaba Debanhi y después por la incertidumbre de quién, o quienes, fueron los culpables de su muerte.
A un año exacto de que el caso de Debahni se convirtió en noticia local para después alcanzar dimensiones internacionales los Escobar Bazaldúa siguen sin respuestas a sus múltiples preguntas, la más importante: ¿Qué pasó la madrugada del 9 de abril?
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La desaparición de la estudiante de Leyes, de sólo 18 años, desencadenó una búsqueda frenética; se peinó a lo largo y a lo ancho de la zona donde fue vista por última vez y semanas más adelante ocurrió lo más temido por la sociedad: El cuerpo de la joven fue encontrado dentro de una cisterna en las instalaciones del motel Nueva Castilla, precisamente en el mismo lugar donde ya se le había buscado.
“Veníamos de una situación muy estresante, de muchos casos que se hicieron públicos... veníamos de las desapariciones de Yolanda (Martínez Cadena), de María Fernanda (Contreras), de una racha de feminicidios y ahora nuestra hija”, señaló Mario Escobar en entrevista para Publimetro.
El papá de Debanhi aún sueña con ver a su hija entrar por la puerta y que llene de alegría la casa en la que todavía viven él y su esposa.
“Todavía estamos esperando que llegue en cualquier momento, que entre, que sea la niña que siempre fue: Llena de vida, llena de cosas bonitas... duele que no tenerla aquí, pero también sabemos que es algo con lo que tendremos que vivir hoy y siempre. Nada nos va a devolver a nuestra hija”.
Hace un año también se desató una ola de pánico entre las mujeres. Las redes sociales difundieron mucha información falsa acerca de bandas de secuestradores y tratantes de blancas que acosaban a chicas, particularmente jóvenes.
Y es que la racha de desapariciones de mujeres en Nuevo León desató histeria colectiva que se vio reflejada en Twitter y Facebook, medios en los que se viralizaron mensajes que advertían sobre la existencia de una banda que traficaba con mujeres.
Por el temor generalizado que se ocasionó, la Fiscalía General de Justicia del Estado se vio en la necesidad de aclararlo en sus redes sociales.
“Han aparecido mensajes y audios en redes sociales señalando secuestros de mujeres o trata de personas. Esos mensajes son falsos y buscan crear miedo o confusión. Busquemos fuentes certeras de información para tomar nuestras decisiones”, compartió la Fiscalía en un claro mensaje para calmar el pánico.
Pero para los Escobar Bazaldúa todo inició cuando Debanhi salió de su domicilio, ubicado en la colonia La Enramada, en Apodaca, el 8 de abril, para acudir a una fiesta con sus amigas Saraí “N” e Ivonne “N”.
Escobar aseguró que esa noche sus amigas habían pasado por su hija. Solo conocía a Saraí. Posteriormente, las chicas llegan en un taxi a una fiesta de un amigo alrededor de las 23:30 horas en la calle Simón Bolívar en el centro de San Nicolás.
En un video captado por cámaras de seguridad, aparecen las tres jóvenes en una tienda de conveniencia comprando una botella de vodka, un refresco de toronja, vasos desechables y una bolsa de hielo. Regresan al lugar de la reunión, en donde Debanhi participó en unos juegos donde consume alcohol, según el relato de Saraí e Ivonne.
Después, las tres se trasladan a otra fiesta cerca del mismo sitio (a unos escasos 500 metros). No obstante, al ver que no les abrían, pidieron un taxi de aplicación, a las 00:49 horas, para ir a otro festejo.
El conductor, Juan David Cuéllar, conducía un Tesla blanco año 2018 y pasa por las tres chicas para llevarlas a su destino. Al llegar al lugar, se dan cuenta de que la fiesta ya había terminado, pero encuentran otro festejo cerca de ahí, en la quinta El Diamante, uniéndose a un grupo de chicos que estaba en el lugar.
Aunque no estaban invitadas el festejado les permite ingresar a las 01:30 horas. Al paso de los minutos, la cámara de seguridad ubicada afuera de la quinta capta el momento en que Debanhi sale corriendo y un joven trata de detenerla; ella lo golpea y le propina una patada.
Enseguida, las amigas de Debanhi y el grupo de jóvenes que las acompañaba se unen para calmar la situación. De acuerdo a las declaraciones de Saraí, Debanhi llevaba consigo la botella de vodka, se muestra en estado inconveniente, manoteaba, insultó a todo aquel que se le acercaba hasta el punto que llega a morder a uno del grupo de amigos.
Saraí añadió que, además, que se quedó dormida aproximadamente unos 15 minutos en el lugar.
Al ver la difícil situación, Ivonne manda mensajes, entre las 03:29 y las 03:36 horas a Cuéllar a quien anteriormente le había pedido su número de celular y solicita un servicio para Debanhi, quien presuntamente se encontraba en estado de ebriedad.
En su declaración a la Fiscalía de Justicia de Nuevo León Cuellar explicó que Debanhi se comportó de manera agresiva y lo insultó en varias ocasiones, ya que ella quería regresar a la fiesta.
A las 04:25 horas, el conductor le manda un mensaje de voz a Ivonne y le dice que Debanhi se bajó de la unidad. Posteriormente, le toma una foto a Debanhi donde aparece en la carretera Monterrey-Laredo, la cual se hizo viral en las redes sociales.
Esa fue la última vez que se le vio con vida, excepto por las grabaciones de las cámaras de seguridad del motel y de una empresa cercana que se dieron a conocer a través de la presión mediática y de la sociedad.
“Pensar en ese último día de Debanhi nos rompe el corazón. Ver esa foto de ella, sola en la carretera y que nadie fue capaz de ofrecerle ayuda nos hace pensar en qué clase de mundo vivimos en el que se ejerce la impunidad, en el que no hay compasión por los semejantes, en el que cualquiera pasa por encima de la autoridad”, expresó Escobar.
La recordaremos el 21 de abril
A pesar de que Debanhi desapareció la madrugada del 9 de abril, la familia Escobar Bazaldúa realizará actos conmemorativos por el primer aniversario del deceso de la joven hasta el 21.
“Fue el día en que la encontramos, el día en que finalmente recuperamos a nuestra hija. Realmente la fecha exacta en que murió ella no se sabe, pero para nosotros es el 21, el día en que la encontramos; será la fecha póstuma en que vamos a hacer algunas actividades que tenemos preparadas”, dijo Dolores Bazaldúa.
Sin embargo, como siempre, el día 8 de abril, los padres de Debanhi estarán en las instalaciones del motel Nueva Castilla para llevar flores y hacer limpieza.
También, señaló Bazaldúa, realizarán una caravana que saldrá del Centro de Monterrey hacia el motel.
“Le vamos a hacer un homenaje, recordarla cómo era e invitar a toda la gente que quiera acompañarnos y poner sus consignas... gente que haya pasado por la misma situación que nosotros y que quiera manifestarse”.
“Haremos un recorrido para la quinta (en la que estuvo Debanhi por última vez) por la carretera a Laredo y llegaremos al motel”.
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A las 19:30 horas, agregó, será la tradicional misa que desde hace un año, mes con mes, realizan para recordar a Debanhi.
