Las vacaciones terminaron o están por acabar. La “vuelta a la realidad”, como dicen comúnmente, puede significar dolores de bolsillo, estrés y otros riesgos si no hubo un adecuado control de gastos.
De acuerdo con Lendingtree, operadora crediticia, alrededor de 36 por ciento de las personas se endeudan para vacacionar y 82 por ciento de esa población no puede pagar su deuda al mes siguiente.
El sobreendeudamiento es un problema generador de estrés financiero que puede conducir a la solicitud de préstamos fáciles y rápidos por medio de aplicaciones digitales, conocidas como montadeudas.
Esta modalidad extorsiva se basa en la cobranza ilegítima, por medio de amenazas de daño personal o reputacional. Los reportes al Consejo Ciudadano de la Ciudad de México han disminuido 26 por ciento en el primer trimestre de este 2024 en comparación con 2022, el año con más casos registrados.
Si vas a recurrir a esquemas crediticios, es mejor hacerlo en el sistema bancarizado, revisar en internet la reputación de la financiera y, por ningún motivo, permitirles acceso a apps de tu dispositivo digital.
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Tras los días de asueto de Semana Santa, el riesgo de pedir prestado está latente y los estafadores pueden presentarse como una opción para quienes no cuentan con capital.
Según el Reporte de Bienestar Financiero 2023, de Invested, solo al 15 por ciento de la población no le generan estrés sus finanzas personales; el resto tiene algo o mucha tensión.
El estrés financiero provoca desde alteraciones emocionales como enojo, tristeza, ansiedad, desesperación o desesperanza, hasta violencia familiar o baja productividad laboral.
En promedio, cada año a través de la Línea de Seguridad y Chat de Confianza, 55 5533 5533, en el Consejo Ciudadano proporcionamos contención emocional a más de 2 mil 500 personas.
Los riesgos después de las vacaciones se pueden evitar.