La Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) confirmó que su nanosatélite Gxiba-1 ha sido aceptado oficialmente por la Agencia Espacial Japonesa (JAXA) para ser lanzado y desplegado desde la Estación Espacial Internacional (EEI), lo que lo convierte en el segundo satélite mexicano en la historia en alcanzar esta plataforma internacional.
El anuncio fue realizado por el Mtro. Eugenio Urrutia Albisua, director de Proyectos Aeroespaciales de la UPAEP, acompañado de Isaac García Sanabria, estudiante de Ingeniería Aeroespacial e integrante del equipo desarrollador.
Urrutia destacó que el primer satélite mexicano desplegado desde la EEI fue el AztechSat-1, también desarrollado por la UPAEP y lanzado en colaboración con la NASA a finales del 2019.
“Gxiba-1 es un logro importante, no solo para la universidad, sino para Puebla y para el país”, expresó.
A diferencia de su predecesor, que tenía como objetivo probar comunicación intersatelital, el Gxiba-1 está diseñado para monitorear volcanes activos en México, como el Popocatépetl y el Volcán de Colima, mediante imágenes captadas desde el espacio.
La información recolectada podría ser compartida con instituciones como el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), con el objetivo de fortalecer los sistemas de alerta temprana ante posibles erupciones.
El desarrollo del nanosatélite comenzó en enero de 2022, tras la obtención de un lugar en un concurso internacional organizado por la ONU y JAXA.
Durante más de tres años, un equipo conformado por 20 estudiantes y hasta 7 profesores trabajó en la integración de los 11 sistemas del CubeSat, de apenas 10x10x10 centímetros y un kilogramo de peso.
El proyecto incluyó pruebas y certificaciones técnicas realizadas en Japón, donde el satélite fue integrado al módulo japonés KIBO, desde el cual será liberado al espacio.
“El proceso con JAXA fue más riguroso que con la NASA, pero nos dejó una gran experiencia. Aprendimos nuevas formas de trabajo y cooperación internacional”, señaló Urrutia.
El lanzamiento está previsto entre octubre y noviembre de 2025, dependiendo de la programación oficial de JAXA. Se contempla que el despliegue ocurra desde territorio japonés, aunque también podrían intervenir otros centros espaciales internacionales.
Gxiba-1 utilizará la tecnología de comunicación probada con el AztechSat-1 y contará con una cámara orientada hacia la Tierra para la captura y transmisión de imágenes a través de la constelación Iridium. Su vida útil estimada es de un año, aunque se espera que, al igual que su antecesor, pueda superar esa duración.