Salarios de tres mil pesos mensuales, al terminar la carrera, es la realidad para 50% de los universitarios de México; quienes desde su ingreso al mercado sufren una grave precarización de ingresos, que no les da ni para cubrir sus necesidades básicas.
Ivonne Vargas, speaker en temas de Capital Humano de la editorial Penguin Random House, evidenció que dicha situación hace que los universitarios aspiren a un máximo de cinco u ocho mil pesos mensuales.
Aunque, si terminan la carrera y pasan dos o tres meses sin ser contratados o no tienen habilidades adicionales a su profesión –como conocimientos en administración, gestión de recursos o alguna especialización– sus posibilidades de obtener más de tres mil pesos se van reduciendo.
Por si fuera poco, apuntó la especialista, la precarización laboral ataca con mayor fuerza a las mujeres, quienes al contratarse –por primera vez– obtienen salarios hasta 40% más bajos que los hombres.
“Mientras las mujeres pueden recibir en tres mil pesos, lo hombres empiezan ganando cinco mil. Y esto te habla de que la brecha de ingresos por género aparece desde que los jóvenes están buscando su primer trabajo.
“Y con tal ingreso, no sólo es difícil cubrir lo básico, sino que es evidente el estancamiento salarial que el país sufre desde hacia varias décadas; debido a problemas estructurales del mercado como la baja productividad y las condiciones generales de la economía”, explicó la también autora del libro Contrátame.
«Apenas 40% de los egresados universitarios está contratado en áreas a fines a la carrera que estudiaron», reveló Subsecretaría de Educación Superior de la SEP.
Carreras y salarios más precarios
En una entrevista con Publimetro, Ivonne Vargas señaló que los egresados de las carreras relacionadas a las ciencias sociales y administrativas; salud, educación, pedagogía, artes y humanidades son los más afectados por salarios más bajos.
Refirió que, en tales áreas, los jóvenes reciben entre tres y cinco mil pesos, de acuerdo a los conocimientos adicionales o habilidades específicas requeridas en cada vacante; además del numero creciente de egresados y, por lo tanto, la fuerte competencia por un mismo puesto.
Destacó que difícil que los egresados de dichas carreras ofrezcan un valor agregado a la industria; porque les hace falta conocimientos y habilidades relacionadas con la gestión de recursos, análisis de datos, tareas administrativas y matemáticas aplicadas.
“Y, es por ello, que las ingenierías, las carreras de nanotecnología o biotecnología; y las áreas que se enfocan a matemáticas aplicadas ofrecen a los universitarios salarios de arranque de hasta15 mil pesos”, puntualizó.
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Precarización de salarios a detalle
Un estudio de Manpower Group reveló que la precarización salarial no es exclusiva de los universitarios y afecta –por igual– a la mayoría de los jóvenes, universitarios y trabajadores del país.
Reveló que, de acuerdo a las estadísticas oficiales existe un importante crecimiento en la creación de empleos con bajos ingresos, de entre uno y tres salarios mínimos; y un consecuente cierre de plazas que ofrecen más cuatro o cinco salarios.
Precisó que, desacuerdo a las cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), entre julio de 2017 y el mismo mes de 2018, se registraron las siguientes aumentos en el numero de plazas formales:
- 10.3% en puestos que ofrecen hasta un salario mínimo.
- 9% en áreas con más uno y hasta dos salarios mínimos.
- 2.9% en empleos con más de dos y hasta tres salarios mínimos.
- 1.3% en actividades que otorgan más de tres y hasta cuatro salarios mínimos.
- 2.1% en plazas de con más de cuatro y hasta cinco salarios mínimos.
- 7.1% en puestos con más de cinco y hasta 25 salarios mínimos.
