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Extorsiones y ejecuciones aterrorizan a transportistas de Zihuatanejo

Los choferes denuncian presiones de grupos criminales, quienes los extorsionan, amenazan y le exigen pagos de cuotas de entre 5 y 10 mil pesos.

Transportistas en Zihuatanejo son víctimas de violencia y de extorsión.

Alrededor de las 12:10 horas del 6 de julio, justo cuando se intentaba normalizar el servicio de transporte en Zihuatanejo, Guerrero, sujetos armados asesinaron a un chofer de la empresa Dos Costas sobre la avenida Cocos, a unos cuantos metros de un jardín de niños. Este homicidio se suma a una serie de hechos violentos ocurridos desde hace, por lo menos, seis semanas en la demarcación, mismos que incluyen la quema de camionetas Urvan y ejecuciones de transportistas.

La tarde del 5 de julio, representantes de la empresa Dos Costas, cuyo recorrido va de Zihuatanejo a Petatlán, se reunieron con autoridades federales y estatales para atender el tema la seguridad en el  transporte. Tras la reunión se reanudó el servicio; sin embargo, cuando el chofer de la unidad 78 fue ejecutado este miércoles, el servicio volvió a suspenderse.

En los últimos siete días, el servicio del transporte se ha suspendido en dos ocasiones en Zihuatanejo, la primera el 2 de julio cuando amaneció un taxista degollado en la Colonia Lomas de Diamante; y sujetos armados le prendieron fuego a una camioneta Urvan de la ruta Zihuatanejo-Coacoyul. La segunda tras el homicidio del chofer de la unidad 78, quien respondía al nombre de Juan.

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Desde hace varias semanas, los choferes han denunciado presiones de grupos criminales, quienes los extorsionan y amenazan. De acuerdo con el periodista Arturo Espinosa, el crimen organizado le solicita a sus víctimas cuotas de entre 5 y 10 mil pesos. Este tipo de extorsiones también se han extendido en otro tipo de negocios como tortillerías y gasolineras.

A inicios de junio se difundió información sobre un presunto toque de queda autoinfligido por los habitantes de Zihuatanejo a causa de la violencia; no obstante, el presidente municipal, Jorge Sánchez Allec, reconoció que había razones para el nerviosismo de la población; pero desmintió el toque de queda. El edil aseguró que se estaba trabajando de manera coordinada con las fuerzas federales, quienes aclaró, son los responsables de la seguridad.

Por su parte, la gobernadora del estado, Evelyn Salgado Pineda, refirió a medios que la situación de violencia que prevalece en la zona no afecta la actividad turística en el municipio del llamado Triángulo del Sol. Asimismo, tras la inauguración de la 68 Reunión Nacional de Contralores de México, celebrada en Acapulco, indicó que se reforzará la seguridad en cada región para que no queden desprotegidas.

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“Si se tiene que reforzar Chilpancingo, reforzamos Chilpancingo, si necesitamos en Zihuatanejo más presencia, bueno pues hacemos precisamente esta reunión para coordinarnos y para no dejar ninguna región desprotegida y que no tenga la vigilancia correcta”, aseveró, Salgado. Cabe mencionar que en la última semana arribaron 300 elementos de la Guardia Nacional a Chilpancingo y 200 más a Acapulco para reforzar la seguridad ante el recrudecimiento de la violencia.

Sin embargo, a pesar de las afirmaciones de las autoridades que destacan el reforzamiento de la seguridad, el trabajo coordinado y la estrategia de seguridad, los hechos violentos, las extorsiones y las amenazas no dejan de ocurrir en el municipio guerrerense.

La Fiscalía General del Estado (FGE) atribuye la violencia en Zihuatanejo a la presencia de grupos criminales. En la zona se han identificado actividades de células de la Familia Michoacana, Cárteles Unidos y del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

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