En las últimas semanas, México solamente ha recibido el 29% de los medicamentos adquiridos como parte de la estrategia para enfrentar el desabasto, informó este martes Jorge Alcocer, secretario de Salud, durante la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El secretario explicó que la demanda de medicamentos del sector Salud consta de mil 840 claves (equivalentes a 520 millones 100 mil 803 piezas de medicamentos), de las cuales, hasta el 11 de octubre se han recibido “150.5 millones de piezas, equivalentes al 29 por ciento de las compradas”.
Alcocer explicó que la notificación de recepción por parte de los estados ha sido lenta, por lo que “se trabaja en acelerar los procesos para contar con las evidencias del medicamento y material de curación requeridos”.
“Estamos revisando en forma particular esta situación, pues el retraso en el tiempo de entrega a las farmacias hospitalarias -una vez que están en el almacén de los estados- tarda mucho y desde luego los centros de salud y los hospitales están en espera, y esto debe corregirse”, añadió el secretario de Salud.
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El desabasto continúa
De acuerdo con el segundo informe cuatrimestral (mayo-agosto) 2021 del Mapeo del Desabasto de Medicamentos en México, realizado por el colectivo #CeroDesabasto, la escasez de medicamentos es un problema persistente en el país.
“Desde febrero de 2019 se han recibido 6,413 reportes de medicamentos o insumos en desabasto validados, y en este cuatrimestre registramos el máximo histórico de reportes: 1,823″, destaca el colectivo en un comunicado. Además, CDMX, el Estado de México, Jalisco y Michoacán concentran el 50% de todos los reportes.
Según los reportes recibidos por la sociedad civil, cáncer, diabetes, post trasplantados, hipertensión arterial y enfermedades de salud mental son las enfermedades con más reportes de desabasto de medicamentos, y aglomeran el 57% del total de los casos denunciados.
“Respecto a las instituciones de salud públicas en las que se ha reportado el desabasto, el IMSS ocupa la primera posición con el 54% de los reportes, seguido por el INSABI con el 21%,el ISSSTE con el 14%, y el 11% restante se distribuye en los servicios estatales de salud, los Hospitales de Alta Especialidad e Institutos Nacionales de Salud y otros subsistemas federales”, añade #CeroDesabasto en su informe.
Cáncer, la enfermedad con menos medicamentos
La patología con más reportes es el cáncer. Uno de cada cuatro reportes es por la falta de algún medicamento o insumo para el tratamiento de esta enfermedad. Seguida por los casos reportados de pacientes con diabetes, trasplantados, hipertensión arterial, y enfermedades de salud mental.
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“Desde el Colectivo Cero Desabasto nos preocupa la agudización en la falta de acceso a los medicamentos en estos últimos meses. La problemática no solo continúa sino que ha empeorado a pesar de los esfuerzos hechos por la autoridad. Hacemos un llamado a las autoridades federales y locales a reconocer la problemática y redoblar los esfuerzos para garantizar el acceso a los medicamentos para todas las personas”, destacó el colectivo que ofrece su reporte completo en su sitio web.
3 PREGUNTAS CON
Andrés Castañeda, coordinador de la causa Salud y Bienestar de @NosotrxsMX.
¿Cuáles son los principales hallazgos en este informe sobre el desabasto de medicamentos en el país?
Lo que vemos en los informes y en los reportes que nos comparten las personas, es que tenemos el doble de desabasto de medicamentos y vacunas reportados en el cuatrimestre anterior. Este es el cuatrimestre con más reportes que tenemos registrado en lo que va de la plataforma. Además, lo vemos también reflejado en otros indicadores, que publicaremos en un próximo informe.
Sabemos, por ejemplo, que nada más en la primera mitad del año 2021 han habido diez millones de recetas no surtidas en el IMSS. Todo esto cuadra mucho con lo que tenemos nosotros identificado en el informe, y nos preocupa.
Nos preocupa también el tipo de patologías. Por ejemplo, ahora, en tercer lugar se encuentran las enfermedades relacionadas con trasplantes (personas que han recibido un trasplante), lo cual sí es novedad. No es que antes no faltaran esos medicamentos; pero en estos últimos meses se ha agudizado la falta en este grupo de pacientes, que sin el medicamento tienen un riesgo muy alto de rechazar el órgano. Lo cual sería una pena porque ya el gobierno -los ciudadanos mexicanos- invertimos en este trasplante, la gran mayoría de los casos proveniente de un donante vivo, y hay riesgo de perderlo por la falta de medicamentos. Eso es lo que es verdaderamente preocupante.
El secretario Jorge Alcocer confirmó que sólo han llegado el 29% de los medicamentos adquiridos, ¿qué lectura dan sobre esa cifra?
Estos datos, que además, según ellos hacen públicos, no cuadran. Nosotros en su momento dijimos “bueno, tenemos esa información que comparten para hacer un informe”, pero están mal, los datos no cuadran.
Nos llama mucho la atención los datos que hacen públicos porque son poco claros y además hablan piezas de medicamentos, cuando es difícil conceptualizar este tema de piezas.
Muchas personas, millones de personas, se quedan sin sus tratamientos cada mes y padecen las consecuencias que esto tiene.
¿Qué habría que cambiar en la estrategia para garantizar el abasto de medicamentos?
La situación se ha agravado por varias razones, la primera es que el desabasto continúa, es decir, no, no se ha logrado subsanar la problemática. La segunda es que en 2020 la pandemia generó que hubiera muchas menos consultas, entonces, hubo un aparente relajamiento. Al haber menos consultas, menos medicamentos se recetaron y a menos personas se les negó el medicamento.
Es complicado. Tendríamos que empezar por reconocer que no está funcionando la estrategia. Estamos mal. Los datos que se generan desde uno de los de las instituciones propias de gobierno nos dicen que estamos mal. Los datos que se generan desde la sociedad civil como otro tipo de plataformas nos dicen que estamos mal. Hay que dejar de menospreciar la problemática y reconocer que tenemos un problema para entonces, partiendo de ahí, poder empezar a resolver.
